Las trampas estadísticas

Claro que no son cifras comparables de un año a otro, de una metodología a otra.  Pero si se hubiera llegado a tomar la nueva estadística del Inegi para medir la pobreza, el resultado hubiera sido una farsa, al bajar estadísticamente de 46.2 a 36.7% la pobreza en el país.

Por eso el Coneval, siendo el Consejo Nacional de Evaluación de los Programas de Desarrollo Social, durante esta semana, no va a dar a conocer las cifras de la pobreza con el Módulo de Condiciones Socieconómicas, precisamente, porque el Inegi no le proporcionó datos consistentes con la metodología que se venía haciendo.

CONEVAL PRUDENTE

En otras palabras, el Coneval durante esta semana, no podrá decirnos cuántos pobres hay en el país.

El dar a conocer la pobreza con el nuevo levantamiento de datos de ingreso del Inegi sería, como lo señaló Excélsior, una mentira estadística, y se podría utilizar para propaganda político-electoral.

A INEGI LE FALTÓ PLANEACIÓN

El Coneval había propuesto tener la misma metodología durante diez años, de 2009 a 2019. Y en efecto, el Consejo sabe que la metodología puede perfeccionarse, pero no como lo hizo el Inegi: sin tener una plena cooperación con el Coneval, que para que quede claro, es el organismo encargado de medir la pobreza en México. Ni más ni menos.

Para Gonzalo Hernández Licona, secretario ejecutivo del Coneval, sí faltó planeación en el Inegi para poder ir teniendo dos encuestas a la vez y así ir afinando la migración de una metodología a otra.

¿POR QUÉ NO MEDIMOS A LOS MÁS RICOS?

En cambio el Inegi lo que hizo fue levantar la encuesta de ingresos de los hogares más pobres, donde se tienen ingresos menores de mil pesos mensuales, y ahí cambiar la forma de levantar los datos. Ahora, por primera vez, regresó a las casas para insistir si de verdad esos eran los datos de ingresos.

Para los estudiosos del tema, el problema todavía es mayor. Porque no sólo quedó disminuida la pobreza con esa metodología, sino que no se hace el mismo esfuerzo para la población de mayores ingresos. De tal forma que, por arte de estadística, hubiera mejorado la distribución del ingreso.

Por ejemplo, hay quien dice que en México ya se podrían tomar los datos fiscales (guardando el secreto fiscal) para revisar la concentración del ingreso, tal como lo hizo Piketty en el caso francés.

ESPEREMOS LA COOPERACIÓN

Hoy veremos al Coneval mencionar que no puede publicar sus datos de pobreza, los que vienen en el Módulo de Condiciones Socioeconómicas, sino hasta entablar con el Inegi, otra vez, un vínculo creíble de cooperación.

Lo otro, haber aceptado la estadística del Inegi, hubiera sido mejorar la distribución del ingreso y reducir la pobreza, así con un solo muestreo. Ahora, esperemos una mejor cooperación entre el Inegi y el Coneval.

LA COSTEÑA, ENCHILADA

El video fue viral. Dos empleados de chiles de La Costeña se orinaron. El video dio para un sinfín de memes sobre la compañía famosa por haber realizado conservas de chiles, y que ahora produce hasta mermeladas y salsa cátsup.

Sin embargo, el manejo de crisis no ha sido lo suyo. Salió tarde a mencionar que los empleados ahora son exempleados. Eso sí: comparte su video corporativo.

La Costeña ya exporta a más de 50 países. Es una empresa global, eficiente, que compite de tú a tú con Herdez. Pero ahora está enchilada por el tema, pero antes de ver su enojo “por el mal gusto” de los memes, debe poner filtros para cerciorarse de quiénes son sus empleados que trabajan ahí. No vemos a diario a trabajadores orinando al inicio de producción en serie.

Esta columna cierra su cortina por vacaciones. Estaremos fuera de circulación para regresar el jueves 11 de agosto a publicar, nuevo, Activo Empresarial en estas páginas.