CIUDAD DE MÉXICO.- En tu alrededor está la clave para que mejores tu productividad.
Ya sea que trabajes en una oficina o tu casa, el espacio en el que dedicas gran parte de tu día, influye significativamente en tu desempeño y los resultados que logras al final.
Diversas investigaciones y expertos se han centrado en el ambiente de trabajo y los elementos que lo afectan, cómo influyen en ti y lo que haces.
Estos resultados pueden inspirarte a hacer algunos cambios en tu espacio laboral, que te ayuden a motivarte y ser más productivo.
Escritorio
Un estudio publicado en el
Diario de Epidemiología de Oxford sugiere que independientemente de que te trabajes sentado o parado por mucho tiempo, lo importante para mantenerte saludable y evitar lesiones en columna o extremidades es la cantidad de energía que usas durante el día a través de actividades físicas.
Ya sea que necesites estar sentado o de pie, es recomendable combinar tu rutina con actividad física. Trata de aprovechar tus descansos para caminar durante unos minutos o subir y bajar escaleras.
Sin embargo, es necesario que pienses en tener un espacio ergonómico.
Fíjate que los elementos que tienes en tu escritorio, como el monitor, el teclado y el mouse, estén colocados de cierta forma que ayuden a que mantengas una postura correcta.
Es necesario que la pantalla de tu computadora esté a la altura de tu mirada para que puedas tener tu cuello derecho. Si usas laptop, coloca alguna plataforma que te permita tenerla a esa altura y usar un teclado independiente, ya que este debe encontrarse a una altura en que tus codos estén flexionados en 90 grados respecto a los hombros.
Recuerda que la altura de tu escritorio debe permitir que puedas tener los pies completamente en el piso.
Foto: Ergonotron.com
Silla
Además de incomodidad, usar cualquier silla para trabajar puede aumentar tu sensación de fatiga y por lo tanto mermar tu productividad.
Lo más recomendable es contar con un asiento ergonómico, ajustable y con descansabrazos, que te proporcione soporte a la espalda, la región lumbar y te ayude a mantener una buena postura el mayor tiempo posible. Esto reducirá tus niveles de agotamiento y evitará dolores de espalda o cuello.
Organización
La publicación especializada
Psychological Science dio a conocer un estudio dirigido por la psicóloga Kathleen Vohs en la Universidad de Minnesota en el que compararon a participantes en ambientes de trabajo ordenados y desordenados.
El análisis concluyó en que un espacio limpio y ordenado influyó en las personas para estar más concentradas, comer saludablemente e incluso ser más generosos, mientras que un lugar de trabajo desordenado suelen ayudar a la creatividad. Sin embargo, por más creativo que logres ser, no ayuda a mejorar tu desempeño.
Pese a que todo depende a tus necesidades y estilos, un buen lugar de trabajo es aquel que te permite cumplir bien con tu trabajo en el menor tiempo posible. Es necesario que cada cosa tenga su lugar y permanezca en este.
Color
Si a pesar de tener el lugar más ergonómico y cómodo sobre la tierra, aún ánimos para trabajar, debes poner atención también en cómo te sientes y el color de tus paredes tienen mucho que ver con esto.
El color influye en tu estado de ánimo. Todas las tonalidades pueden ayudar a tu productividad, dependiendo en el tipo de necesidad que tengas.
De acuerdo con un estudio en la
Universidad de Texas, las oficinas con colores gris, beige y blanco induce a sentir tristeza y depresión, especialmente en las mujeres.
- Rojo: acelera tu ritmo cardiaco, por lo que puedes sentirte con más energía, sin embargo, puede cansar tu mirada.
- Naranja: Es un color sociable que alienta a interactuar. Puede funcionar en salas de juntas o diferentes espacios para socializar, sin embargo tal vez no sería la mejor opción para estimular la productividad.
- Amarillo: Estimula creatividad y optimismo; puede ser muy buena opción para un diseñador o si te dedicas a algo creativo.
- Verde: Para el cerebro humano, este color es percibido como neutral. Ayuda a relajarse y tampoco lastima los ojos después de mucho tiempo.
- Azul: Relajante y estable, este color es el que ayuda a más personas a concentrarse en tareas difíciles.
- Morado: Pese a no ser un color muy recurrente en las oficinas, ayuda a estimular la solución de problemas.
Temperatura
Tener una oficina muy fría puede provocar que cometas más errores. Un estudio encabezado por el profesor
Alan Hedge de la Universidad de Cornell estimó que la cantidad fallas pueden incrementarse hasta 44% en lugares con bajas temperaturas. Sin embargo, estar en un espacio muy caluroso también puede afectar tu desempeño, al evitar una mayor concentración.
De acuerdo con otra investigación de
Nature Climate Change, la mayoría de las personas prefieren que el termostato se encuentre alrededor de los 24 grados centígrados.
Iluminación
Un lugar de trabajo ideal necesita tener suficientes ventanas para aprovechar la luz natural, ya que te ayuda a tener mejor humor y por lo tanto aprovechas mejor tu día de trabajo.
En el caso de la luz fluorescente, además de las afectaciones al medio ambiente y el gasto de energía, en el estudio de Hedge de la
Universidad de Cornell también se destaca te debilita y por lo tanto eres menos productivo.
Además una mala iluminación puede tener efectos tan nocivos como la malnutrición, ya que la luz solar ayuda al cuerpo a sintetizar la vitamina D, que es imprescindible para la absorción de calcio y magnesio en los huesos.
De no ser posible que cuentes con luz natural, la ilumnación con lámparas LED pueden ser un buen sustituto.
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