Lo que ocurriría con el tema migratorio después de las elecciones en EU

CIUDAD DE MÉXICO.- El tema migratorio para la región americana será uno de los sectores más vapuleados después de este 8 de noviembre, cualquiera que sea el resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

Expertos en migración del ámbito académico y sociedad civil organizada prevén que Donald Trump, de ganar la Casa Blanca, “dé una bofetada” para la migración que busca llegar a Estados Unidos y a los emigrantes indocumentados en ese país.

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Mientras, en el otro escenario con Hillary Clinton señalan que la contienda ya marcó una estrecha división entre los estadunidenses de todos los sectores sociales, lo que dificultará a la exsecretaria de Estado cumplir con una reforma migratoria o dialogar con los gobiernos principalmente implicados, los centroamericanos y mexicano.

Hasta cierto punto, los especialistas consultados por Excélsior identifican en ambos candidatos que, al final, sus propuestas coinciden en seguir reforzando controles fronterizos.

El llamado que hacen a los gobiernos que compete esta responsabilidad compartida, especialmente al de México, a ir más allá de la coyuntura electoral y presionar para atender de manera urgente el tema, tomando en cuenta la migración transnacional.

Insisten que la Presidenta o Presidente electo en EU no puede seguir la política nacional migratoria actual que ha deportado a más de tres millones de indocumentados, mayoritariamente mexicanos y centroamericanos, en el periodo de Barack Obama; ni ignorar el éxodo de inmigrantes haitianos y africanos varados en México, esperando asilo de la unión americana.

Será bofetada

El académico Rafael Fernández de Castro resalta que urge un acuerdo de México, Estados Unidos y los países del triángulo del norte centroamericano.

También se han incrementado mucho los transmigrantes de otras regiones del mundo extracontinentales y también los haitianos, como sabemos que están varados, y los cubanos. Tenemos un serio problema de transmigración”, apuntó.

Señaló que durante el año fiscal 2016 “la patrulla fronteriza de EU atrapó a más de los que llaman OTM, los Others than mexicans (Otros no mexicanos).

Eso quiere decir que el flujo es mayor de transmigrantes que el de emigrantes mexicanos. Urge sentarnos con Estados Unidos, ponernos de acuerdo y ver qué hacemos con la frontera norte”, dijo.

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El jefe del Departamento de Estudios Internacionales del ITAM ve “difícil que Hillary se siente a hablar de este tema porque evidentemente va a tener muchos problemas en sí. Hoy EU es un país muy dividido, y ella tendrá que tomar decisiones muy importantes”.

-Si con Clinton es difícil el diálogo, ¿con Trump?

No, con Trump no hay diálogo, con Trump serían bofetadas, con Trump estaríamos hablando de deportaciones masivas, con Trump las cosas se dificultan enormemente”, contestó.

Por su parte, el doctor José María Ramos, del Colegio de la Frontera (Colef), apuntó que los candidatos republicano y demócrata tienen similitudes en su política al respecto.

El candiadato Trump, dijo, plantea seguir con la expulsión masiva de indocumentados que emprendió Obama, “incluso fortalecer esta vinculación de la policía federal, aduanas y control fronterizo para seguir vinculándose con las locales para impulsar expulsiones”.

Con Hillary Clinton no ve un panorama muy positivo, iniciando porque no ha hecho propuestas concretas para grupos como los jóvenes llamados dreamers o dar fin al tema de separación de familias migrantes.

Con Clinton, su matiz es hasta cierto punto distinto. Aunque ella no lo dice es seguir fortaleciendo el tema de control fronterizo, porque finalmente ella, como candidata demócrata tiene que seguir ciertas prioridades en la presente administración aunque ella le agrega un matiz, de una reforma integral y en esa reforma lo que está incluido es avanzar hacia una reforma migratoria”, dijo el investigador del Departamento de Estudios de Administración Pública.

Apuntó que en el caso de México, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) debe definir prioridades y velar por intereses, pues la deportación masiva de migrantes pondría en riesgo los 25 mil millones de dólares anuales que se envían de remesas a este país.

El tema a corto plazo son las elecciones, pero vamos a convivir siempre con Estados Unidos, entonces se debe tener una visión muy pragmática y muy heterogénea de lo que representa la diáspora mexicana para Estados Unidos. Eso debe promover la cancillería”, dijo.

Para Carlos Mora Álvarez, presidente del Consejo Estatal de Atención al Migrante de Baja California, “es importante que todos los latinos, en general y todos los no nacidos en la unión americana con derecho al voto –donde hay más de 55 millones de latinos– utilicen su derecho en contra de Trump”.

En su estado, indicó que han recibido en los últimos meses a casi 15 mil extranjeros, en su mayoría haitianos y africanos, y poco más de 10 mil han sido atendidos por la unión americana.

“Nos han dicho extraoficialmente que, una vez que concluya el proceso el próximo martes 8 de noviembre la actividad de recepción será mucho más ágil, receptiva, será mucho más receptiva y sobre todo mucho más eficiente.

No han querido mezclar este tema hoy las autoridades de Estados Unidos para evitar mayores complicaciones y darle argumentos al candidato republicano que ha sido terriblemente crítico e ineficientemente en su discurso xenofóbico, antinmigrante”, dijo.

El presidente del Consejo que congrega a 65 instituciones del estado, entre gubernamentales y del sector social, advirtió también sobre las “alarmantes cifras de deportaciones de connacionales.

“A nuestra entidad han sido deportados, a la primera semana de noviembre, un poco más de 60 mil connacionales y poco menos a Tamaulipas, somos las dos primeras entidades federativas que reciben connacionales. “En total son 120 mil.

Una tercera parte de esa cantidad se distribuyen en las ciudades de Sonora, Chihuahua y la Ciudad de México, proyectamos que vamos a llegar a las 200 mil repatriaciones al último día del mes de diciembre”, dijo.

kgb