José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

1 Dic, 2016

Trump con Carrier, más mentiras con algo de verdad

Donald Trump sigue mintiendo sobre las empresas y México. Ya lo había hecho con Ford, la automotriz que recibió una y otra vez presiones del ahora Presidente electo. Cuando Trump dijo que la línea de los vehículos Lincoln se iba a mantener en EU tenía razón, porque dicha línea de camionetas (las Lincoln MKC) no iba a salir de la planta de Louisville, en Kentucky.

Dicha línea se iba a quedar en Estados Unidos. Mientras por otro lado, Ford desde hace años produce en su planta de Hermosillo, Sonora, en México,  el sedán Lincoln MKZ. Otra vez, vemos a un Trump con otra mentira piadosa para sus votantes, ahora acerca de Carrier.

CARRIER MANTIENE SU PLANTA EN NUEVO LEÓN

Carrier, la empresa conocida por producir sistemas de calefacción, también fue presionada por Trump para mantener empleos en Estados Unidos, en Indianápolis.

De hecho, Carrier tras un encuentro con Trump, anunció que mantendría mil empleos en Indianápolis, pero cuando vemos más a fondo la información, notamos que Carrier ya tiene lista su planta en el municipio de Santa Catarina, en Nuevo León. La planta en México que tendrá un costo total de 200 millones de dólares, todavía no está terminada, pero la inversión sigue su curso.

Otra vez Trump habría mentido con la verdad: logra anuncios publicitarios, supuestamente a favor de los empleos estadunidenses y en contra de la economía de México.

TRUMP SÍ PRESIONARÁ A LA BAJA LA IED

Trump, desde luego representa un riesgo para México. Quien será el nuevo inquilino de la Casa Blanca ve como triunfos de EU los fracasos de México. Su gestión desde luego se traducirá en presiones para las empresas estadunidenses que vienen a nuestro país. La principal fuente de procedencia de la inversión extranjera directa es, precisamente, de empresas estadunidenses. La inversión foránea va a declinar, irremediablemente.

MEADE: INVERSIONES IMPULSADAS POR EL ESTADO

De ahí la importancia de lo dicho por el secretario de Hacienda. José Antonio Meade reconoció, de manera realista, que la inversión extranjera se va a ver afectada.

Por ello planteó mantener las inversiones provenientes de las reformas estructurales, que son tres grandes rubros:

La Reforma Energética traerá inversiones a Pemex con sus nuevos socios privados. Ya se supo que José Antonio González, director de Pemex, va con Chevron para obtener contratos de aguas profundas. También se verá cuáles son los nuevos socios para ir al megacampo Trión, en aguas profundas.

La Reforma en Telecomunicaciones traerá la inversión en la red compartida, la de la Banda 700, que será a través de una Asociación Público-Privada que va con el Grupo Altán, y en la que se plantean inversiones millonarias en los siguientes años. La construcción del nuevo aeropuerto capitalino también traerá inversiones fuertes. El aeropuerto inicia nuevas etapas, de construcción de la terminal y pistas, por lo que las inversiones estarán llegando.

ADEMÁS, DIVERSIFICAR Y MERCADO INTERNO

El gobierno de Peña Nieto hace lo correcto: utilizar los recursos públicos para estimular las inversiones. Pero no será suficiente. Tendremos que reactivar el mercado interno, con la discusión de salarios mínimos, así como ir diversificando el mercado externo al utilizar todos los demás acuerdos comerciales.

Estamos frente a un nuevo Presidente de Estados Unidos, sin conocimientos económicos, sin lógica económica, que confunde sus conflictos de interés y fobias personales con los intereses nacionales. Y apostará por regresar a la economía de los ochenta, cerrada, llena de nacionalismos y discursos racistas. El riesgo para México es inminente.

ALZA EN SALARIO MÍNIMO, CCE Y COPARMEX

La Coparmex considera que el salario mínimo debe empezar a aumentar. De acuerdo: Hoy el minisalario no alcanza ni para comprar una canasta básica de alimentos.

Pero el Consejo Coordinador Empresarial pide prudencia. Juan Pablo Castañón, presidente de los empresarios, pidió no caer en excesivos aumentos que pudieran ser inflacionarios. La propuesta de Coparmex es coherente: aumentar el salario mínimo con la inflación, más ir elevando el salario mínimo con montos nominales (no porcentuales) que eviten el efecto faro para impedir que los sindicatos los tomen de excusa y también suban de más sus percepciones.

El aumento del salario mínimo es indispensable, por equidad, mercado interno y se puede hacer bien, sin generar inflación.

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