Lo que piensan los líderes empresariales tras el triunfo de Trump

El 10 de noviembre, el columnista de The New York Times Andrew Ross Sorkin, habló con los principales líderes empresariales de Estados Unidos por primera vez desde los resultados de la elección presidencial. 

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La conferencia anual DealBook presentó conversaciones con destacados empresarios y otros líderes de opinión, que expresaron su reacción ante la elección de Donald J. Trump.

William A. Ackman: “Optimista con Trump”

Un inversionista multimillonario manifestó su apoyo a otro empresario multimillonario.

William A. Ackman le dijo al público que el miércoles se había despertado “optimista con Trump”.

Fue un viraje para Ackman, que es conocido por su apoyo a causas liberales. 

Ackman, que maneja el fondo de cobertura Pershing Square Capital Management, con un valor de 11,600 millones de dólares, declaró que le gustaba la idea de que el presidente electo vaya a manejar al país como si fuera una empresa.

“Se van a hacer muchas cosas”, aseguró Ackman.

Lloyd Blankfein: Un “plan de contingencia para todas las posibilidades”

Lloyd Blankfein es conocido por tomar decisiones ganadoras en materia de inversión, pero al igual que muchos otros financieros de Wall Street, el jefe de Goldman Sachs se equivocó en las apuestas de la elección presidencial.

Durante la campaña, Blankfein manifestó su apoyo a la candidatura de Hillary Clinton y apareció personalmente en un anuncio de televisión que presentaba a los demócratas como títeres de la élite financiera global.

Pero el 10 de noviembre, el jefe de Goldman pareció deseoso de ver cómo iría a gobernar Donald J. Trump.

Yo conozco bien a Trump como candidato en campaña”, afirmó Blankfein. “Pero uno llega a ese cargo y empieza a pensar en cuál será su lugar en la historia”.

Blankfein dijo no estar sorprendido por el repunte de dos días que tuvo el mercado bursátil _ pese a que los analistas habían predicho un hundimiento en caso de que Trump resultara electo _, pues las políticas del republicano, que básicamente consistirán en recortar impuestos y derogar regulaciones, “apoyarán a los mercados”.

Aunque Blankfein adoptó un tono relativamente optimista sobre el inminente gobierno de Trump, él trató de tranquilizar a los empleados de Goldman respecto del resultado de las elecciones.

El miércoles, Blankfein difundió un mensaje a todos los empleados de Goldman en el mundo, tratando de tranquilizar a la firma a raíz de la victoria electoral de Trump que, dijo, “nos sorprendió a muchos, igual como lo vimos este año en ocasión del referendo británico sobre la salida de la Unión Europea”.

Les dijo a los empleados que no podía prever si el resultado de la elección de Trump sería “bueno o malo a largo plazo”, pero que Goldman Sachs necesitaría “un plan de contingencia para todas las posibilidades”, según la transcripción del mensaje revisada por The New York Times.

En ese mensaje, Blankfein también habló de las palabras cáusticas de Trump, que a lo largo de su campaña tuvieron tonos racistas, sexistas y xenófobos.

Howard Schultz: “Es difícil entender”

“Esta mañana tenía la imagen de una suástica”, afirmó Howard Schultz, director general de Starbucks, el 10 de noviembre.

Schultz, abiertamente simpatizante de Hillary Clinton, señaló que últimamente había visto algunas cosas perturbadoras en Estados Unidos. “Es difícil de entender”, indicó.

Schultz precisó que sentía que buena parte del país y del mundo estaban en estado de conmoción e incredulidad ante el resultado de la elección presidencial. 

Sin embargo, afirmó que la victoria de Donald J. Trump probablemente haya sido resultado de años y años de que mucha gente sentía que nadie le hacía caso en Estados Unidos.

En septiembre, cuando Schultz apoyó a Clinton, los simpatizantes de Trump convocaron a boicotear a Starbucks. Sorkin le recordó a Schultz que en una ocasión, Trump declaró que las cafeterías más exitosas de Starbucks estaban situadas en la torre Trump.

“Eso no es verdad”, replicó Schultz.

Indra Nooyi: “¿Cómo se atreve a hablar así de las mujeres?”

“¿Tienen una caja de pañuelos desechables?”, preguntó con una sonrisa Indra Nooyi.

A Nooyi, directora general de PepsiCo y simpatizante de Hillary Clinton, le acababan de preguntar cómo se sentía después de la elección.

Ella felicitó al presidente electo Donald J. Trump pero después manifestó su profunda tristeza y su decepción por el resultado electoral.

He tenido que responder a muchas preguntas, de mis empleados, de mis hijas ... todos estaban de duelo”, aseguró. “Todos nuestros empleados estaban llorando y la pregunta que se hacían, especialmente los que no son blancos, era si estaban a salvo. Las mujeres se preguntaban si estaban a salvo; las personas LGBT se preguntaban si estaban a salvo. Nunca pensé que tendría que responder a esas preguntas”.

Eric Schmidt: “Ahora vivimos en línea”

La mayoría de las figuras públicas debe de suponer que llegará el momento en que se dé a conocer información sobre ellas. Al menos eso es lo que piensa Eric Schmidt, presidente ejecutivo de Alphabet, la compañía matriz de Google.

Los mensajes de correo electrónico entre Schmidt y el equipo de campaña de Hillary Clinton fueron robados y publicados en línea por WikiLeaks. Él habló abundantemente sobre la importancia de reforzar la seguridad digital y dijo que el presidente electo Donald J. Trump debería de crear una división dentro del gobierno federal para dedicarse a revisar la seguridad de sus sistemas.

“Ahora vivimos en línea”, sentenció. “Si tomamos el teléfono inteligente de una persona, es igual o peor que tomarle su billetera”.

Comentó que Julian Assange, el fundador de WikiLeaks, alguna vez le dijo que, ya que “los gobiernos son capaces de un mal sistémico, lo cual requiere planeación”, dar a conocer cualquier forma de actividad, a cualquier nivel, impediría que los gobiernos llegaran “demasiado lejos en ese mal”. Sin embargo, Schmidt matizó su relato señalando que “el problema con este argumento, por supuesto, es que él mismo se erige en juez de eso”.

Schmidt agregó que el gobierno de Estados Unidos todavía no ha encontrado la manera de impedir ataques digitales de otros países.

“China ha sido responsable de la gran mayoría de los ataques comerciales y, sin embargo, mantenemos buenas relaciones con China en general”, señaló.
 

kgb