CIUDAD DE MÉXICO.- Con el surgimiento de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA), el mercado no crecerá, sino que se fragmentará e incrementará la complejidad del sector, según un estudio de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef).
Esta fragmentación se concentrará en las acciones de emisoras de mayor tamaño y mayor liquidez. Esta división tendrá un efecto en la complejidad de la regulación y de la ejecución de órdenes de los inversionistas”, indicó el documento.
La política pública de abrir el mercado a una segunda Bolsa, no solucionará el problema estructural del mercado en México; se tendrá una competencia que resultará en costos y en ineficiencias para los participantes y los inversionistas, se explica en el documento.
Los autores afirman que otra Bolsa no cambiará las condiciones de oferta, ni el comportamiento de los intermediarios colocadores.
EMISORAS
La Fundef llegó a dichas conclusiones luego de considerar que, en comparación a otros países, existe un reducido número de empresas listadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
En India hay cerca de 8,000; Estados Unidos con más de 4,000; España con alrededor de 3,500; o mercados como Malasia o Taiwán que tienen cerca de 1,000.
Uno de los principales desafíos que tendrá BIVA, es que el principal costo de entrada al mercado se paga a los intermediarios colocadores, que son los responsables de acompañar a los emisores en su proceso de colocación y en distribuir sus títulos, asegura la fundación.
dvr