Reglas para asignación de slots en AICM

Después de cuatro años de la primera declaratoria del AICM, que dirige Alexandro Argudín, como aeropuerto saturado, dos años y medio de una investigación iniciada en la Cofece, que preside Alejandra Palacios, para determinar si hay o no concentración en la asignación de slots del AICM, tras la fuerte crítica que realizó el Departamento del Transporte de Estados Unidos (DOT) y las aerolíneas nacionales e internacionales sobre el proceso de designación de horarios de aterrizaje y despegue, por fin la Dirección General de Aeronáutica Civil, que dirige Miguel Peláez Lira, mandó a la Cofemer las Bases Generales para la Asignación de Horarios de Aterrizaje y Despegue en Aeropuertos en Condiciones de Saturación.

Las subieron ayer hacia las 18:00 horas a la Cofemer y dado que el proceso de mejora regulatoria transcurre en un plazo máximo de 60 días naturales, se puede anticipar que concluya antes de que inicie el siguiente periodo legislativo en la Cámara de Diputados. “Hecho Relevante” porque a la Ley de Aviación Civil le van a dar una repasadita.

Las bases establecen los criterios de carácter general que deben aplicar los concesionarios aeroportuarios a través de sus administradores aeroportuarios, el Comité de Operación y Horarios, el Subcomité de Demoras, la DGAC, el Seneam y el coordinador de Horarios en los aeropuertos en condiciones de saturación.

Éste último será el actor clave en las nuevas reglas, no lo designará el administrador del aeropuerto sino la DGAC. De facto es quien ha operado el Slotix desde el 1 de abril, y el coordinador será responsable de asignar los horarios de aterrizaje y despegue de “forma imparcial, transparente y no discriminatoria a transportistas aéreos, así como de la supervisión, evaluación y calificación de la ocupación de los horarios asignados a los transportistas aéreos, a fin de lograr una eficiencia óptima en el uso de la infraestructura aeroportuaria, con el propósito de incrementar al máximo los beneficios para la mayor cantidad posible de usuarios del aeropuerto, garantizando la continuidad de las operaciones aéreas”.

Y como se trata de reglas, por primera vez se define qué es y cómo se mantiene un derecho histórico, en qué condiciones se pierde, cuáles son los horarios ad hoc y cómo se integra el fondo de reserva de slots para asegurar que los nuevos entrantes en el aeropuerto tengan al menos 5 slots para operar en el día que lo solicita y el cómo pueden intercambiarse slots de manera individual entre aerolíneas.

Usted sabe que como parte del proceso de integración condicionado de Delta, de Ed Bastian, y Aeroméxico, de Andrés Conesa, se dieron y se darán intercambio de slots en el AICM, el único aeropuerto saturado de México, lo que implicó un proceso de cesión de slots que servió de marco para facilitar la operación de las nuevas aeorlíneas entrantes del mercado aéreo México-Estados Unidos, por lo que estas reglas son un asunto de certeza jurídica para que sepan a qué atenerse y cómo se realizará la convivencia entre aerolíneas y aeropuerto en lo sucesivo.

Y uno de los elementos clave de las bases que fueron subidas para comentarios de la industria, será “prioridad histórica”, entendiendo el principio por el que los transportistas aéreos tienen derecho a recibir de forma preferente a cualquier otro transportista una serie de horarios que hayan operado, mínimo, durante 85% del tiempo del periodo asignado en la temporada equivalente anterior y no haya tenido demoras de 15 minutos respecto al horario asignado en más de 15% de las ocasiones. Creo que para Aeroméxico y Delta será fuerte si se aplica, pero para quienes será más es para Interjet, de Francisco Garza y Volaris, de Enrique Beltranena.

También las reglas dejan claro que ninguna aeronave civil u oficial podrá tener asignación de slot en horario saturado, salvo cuando se trate de operaciones de seguridad nacional y del Estado Mayor Presidencial, por lo que salvo que vuelen entre 11 de la noche y 5 de la mañana, en el AICM ya no podrá salir ninguna aeronave rentada por corporativos o dependencias públicas.

DE FONDOS A FONDO

#Infonavit-IGS... El Grupo Desarrollador IGS (Industria Global Solutions), que encabeza Antonio Ruiz Galindo, expresidente de la Amexcap, realizó la primera llamada de capital del Certificado de Capital de Desarrollo (CKD)  que lanzó por 2,700 millones de pesos el pasado 8 de mayo. Levantó 540 millones de pesos apoyado en Bank of America Merrill Lynch y C4P1T4L como estructurador.

Lo interesante es el foco que le ponen al CKD, pues uno de los grandes problemas que enfrentó (y sigue) el proceso industrial de construcción de vivienda es la disponibilidad de reservas territoriales que cumplan con los criterios de elegibilidad de la política pública que se ha definido (vertical en zonas urbanas y horizontal donde haya disponibilidad de servicios).

El que el estructurador sea un independiente que adquiere tierra para desarrolladores, puede facilitar el proceso de reactivación de vivienda nueva y de reuso de zonas de vivienda, y pueden ser declaradas polígonos urbanos a redensificar. Colonias cuyas casas se construyeron hace 50 años, por ejemplo, que han tenido un proceso de envejecimiento natural, pueden ser recuperadas por terceros no constructores. Eso explica por qué el Infonavit, de David Penchyna, vio con muy buenos ojos este CKD que hoy da campanazo en la BMV, que dirige José Oriol Bosh.