Darío Celis

Tiempo de negocios

Darío Celis

25 May, 2017

Cofece amplía investigación

La buena noticia es que Agustín Carstens ya anunció que el Banco de México va a crear un código de conducta para supervisar el mercado local de bonos, lo malo es que ya se va al Banco Internacional de Pagos.

En el ínter, la investigación de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) al sector financiero, por la manipulación de precios en la deuda gubernamental, sigue profundizándose.

Ya es claro, en este sector, que el expediente que detonó las pesquisas del organismo antimonopolios que preside Alejandra Palacios fue la cruenta lucha que, años atrás, emprendió el BBVA-Bancomer contra Pensionissste. La filial del banco español, de Francisco González, se dio a la tarea de manipular las subastas de bonos en un esfuerzo para fijar la tasa del papel a 30 años y que dicha afore se comió casi en su totalidad.

La estrategia financiera para ablandar a Pensionissste y los muchachos del ya removido José María de la Torre, la enderezó el director de Mercados Globales del BBVA-Bancomer, Álvaro Vaqueiro, con apoyo de sus colaboradores Guillermo Vega y Mauricio Dibildox, con la ayuda de su área de ventas, liderada por Francisco Chisco Rivera, cuñado, ni más ni menos, que de Luis Robles Miaja, el presidente del consejo.

El titular de la Autoridad Investigadora, Carlos Mena, amplió su objetivo y ahora está pidiendo carretadas de información a los implicados, datos que incluyen todas las operaciones de determinados instrumentos en plazos específicos, no más allá de diez años, por medios electrónicos o verbales que van desde grabaciones hasta mails, pasando por testimonios orales o por escrito que permita validar.

BBVA-Bancomer, que dirige Eduardo Osuna; Citibanamex, que comanda Ernesto Torres Cantú; Santander, que preside Marcos Martínez; HSBC, que encabeza Nuno Matos; Bank of America, que lleva Emilio Romano; JP Morgan, que capitanea Eduardo Cepeda, y Barclays, que conduce Raúl Martínez Ostos, son los principales formadores de mercado que, ya es público, son los primeros investigados por la Cofece.

En el caso de Citibanamex, el grupo compacto en las operaciones de deuda gubernamental, está o estuvo integrado por ejecutivos como Alexis Brachet, Guillermo Gómez, Andrés Matas y Jaime Zenizo, este último ya integrado al HSBC; en el de Barclays, el grupo de Pablo Limón, hoy en Santander, y Adolfo Estrada, ahora en la correduría Goldman Sachs.

En el de Bank of America, Salvador del Valle, exING; Herbert Pérez, quien se fue al HSBC; Jorge Clasing, que saltó al Deutsche Bank y terminó en Santander, y Eduardo de la Garza, que venía del HSBC y recientemente salió del mismo BofA; en el caso del JP Morgan, José Oriol Bosch, hoy en la dirección de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y convenientemente del Indeval.

En el caso de Santander, Luis Betancourt, José Antonio Gómez Aguado, Eugenio Olhovich, Sergio Zermeño, ahora en Interacciones; Isaac Marín, ahora en Enlace, además de los mencionados Pablo Limón y Jorge Clasing.

Y del HSBC habrá que buscar a Fernando Pérez, hoy en BIVA; Julio Cárdenas, actualmente en Afore Banamex; Jorge Pino, que se fue a Interacciones; Manuel Abello, ahora en Actinver, amén de los citados Herbert Pérez y Eduardo de la Garza.

De la mano de estos intermediarios, la Cofece va a iniciar el rastreo de información a firmas de corretaje como Enlace, que lleva Eduardo Riba; Remate, de Jacques Levy; Tradition, de Javier Mateo; SIF, de la BMV, que dirige Gabriel Rodríguez; Tullet Prebon, de Francisco González, y GFI, de Alfredo Kawas y Rodolfo Sánchez, ya que muchas de las  operaciones se “registraban” por brokers para evadir el rastro.

De hecho, Riba, Levy y Sánchez trabajaron muy de cerca, por lo que poseen buena información, al igual que Carlos Quevedo y Eduardo Flores. El primero fue vicepresidente de Supervisión Bursátil de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y ahora está en JP Morgan; el segundo ocupó su lugar, pero dicen que está por irse al bufete White & Case.

ARRIBA CHIAPAS

Ayer, el IMSS, que comanda Mikel Arriola, hizo públicas las propuestas técnicas y económicas presentadas para la Licitación Pública Internacional LAO19GY019-E56-2107. Fueron 11 ofertas de nueve consorcios que agrupan a 22 empresas.

Con todo y el respaldo de la Función Pública, que maneja Arely Gómez, y del Órgano Interno de Control, a cargo de Marco Antonio Andrade, no dejó satisfechos a un buen número de concursantes. Entre ellos se habla de un proceso que tiene los dados cargados hacia Servicios Industriales Institucionales.

Esta compañía chiapaneca ha ganado, en la actual administración, un total de 64 contratos, de los que 17 fueron por adjudicación directa. Esta licitación del IMSS tiene un presupuesto de tres mil 200 millones de pesos y es transexenal. Ocho compañías lo impugnaron.

RADIORAMA-ACIR

Radiorama, de Javier Pérez de Anda y Edgar Pereda, quiere convertirse en el principal grupo de la radio. Desde hace tiempo, su accionar no ha sido del todo transparente.

No pudo entrar directamente a la puja de frecuencias porque está bajo la lupa del Instituto Federal de Telecomunicaciones. Una adquisición irregular de estaciones a Acir, de Francisco Ibarra, derivó en que este regulador, que preside Gabriel Contreras, ordenara disolverla, que fueran multados y regresaran el dinero.

Radiorama tiene ya el control de Núcleo Radio Mil, lo que permitió su entrada a la Ciudad de México. Otra vez la autoridad está escrudiñando la transferencia de recursos y acciones. Para terminar de coronar el asunto, el mismo grupo de Edilberto Huesca entró a la licitación, ganó dos concesiones en Campeche y no pagó los 50 millones de pesos.

Síguenos en Twitter @DineroEnImagen y Facebook, o visita nuestro canal de YouTube