Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

Maricarmen Cortés

25 Jul, 2017

Detiene Banxico Ley Fintech, por bitcoin

 

La subsecretaria de Hacienda, Vanessa Rubio, continúa trabajando a marchas forzadas con Jaime González Aguadé, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores; Osvaldo Santín, jefe del SAT; Agustín Carstens, gobernador del Banxico; Carlos Ramírez, presidente de la Consar, y Norma Alicia Rosas, presidenta de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, en el proyecto de la nueva Ley de Tecnología Financiera que permitirá regular a las empresas fintech.

Aunque ya había un acuerdo en principio y ya se había enviado el anteproyecto de ley a intermediarios financieros, a última hora el Banxico puso varias objeciones, en especial en el tema de bitcoin o monedas virtuales, que forman parte de esta nueva ley.

Lo que pretende Vanessa Rubio es aterrizar cambios, ya con el visto bueno de Agustín Carstens, para cumplir la meta de enviar la iniciativa de Ley al Congreso de la Unión en septiembre, una vez que arranque el próximo periodo ordinario y antes de que Carstens deje el cargo de gobernador del Banxico el próximo 30 de noviembre.

Se mantiene la propuesta de crear las nuevas Instituciones de Tecnología Financiera (ITF), que podrán ser de financiamiento colectivo, fondos de pago electrónico y de administración de activos virtuales.

Indispensable, aprobación del Banxico

El problema con el Banxico son las ITF de administración de activos virtuales, y es que Carstens considera que se debe avanzar lentamente en la regulación del bitcoin y otras monedas virtuales, aunque la realidad es que cada día se realizan miles de transacciones en bitcoins, que es ya la moneda virtual preferida de los ciberdelincuentes.

En el anteproyecto de la nueva ley se propone que las ITF autorizadas por la CNBV sí puedan realizar operaciones, como poner en contacto a terceros con la finalidad de facilitar la compra, venta o cualquier otra enajenación de activos virtuales; comprar o vender, en general, activos virtuales por cuenta propia o de clientes y recibir activos virtuales para realizar transferencias o pagos de una persona física o moral, incluida otra institución de administración de activos virtuales.

En el anteproyecto de ley se contemplaba también que será el Banxico el que definirá las características de los activos virtuales; las condiciones y restricciones de las operaciones que se pueden realizar con ello y las medidas a las que deberán sujetarse las ITF en la custodia y control de los activos virtuales. Sin el visto bueno del Banco de México sobre la nueva regulación, no será posible que la nueva ley se envíe este mismo año al Congreso.

Pemex, otra buena noticia

Otra buena de José Antonio González, director general de Pemex —quien logró enderezar el barco en tiempo récord—, es que la empresa informó que cubrió ya sus necesidades de financiamiento no sólo para este 2017 sino también para 2018, fortaleciendo su posición de liquidez. González Anaya aclaró que esto no implica que Pemex siga realizando emisiones en los mercados para mejorar su situación financiera. Actualmente, más del 80% de la deuda de Pemex está a tasa fija ­en un contexto de alza en tasas de interés— a un plazo promedio superior a los ocho años, lo que, evidentemente, fortalece a la empresa con un menor riesgo.

El fin de semana, Pemex colocó cinco mil millones de dólares con una demanda de cerca de 15 mil mdd con reapertura y colocación de dos bonos a plazos de diez y 30 años y recompra de bonos con vencimiento en 2018 y 2019.

Pemex informó que tiene ahora disponibilidad total de sus líneas de liquidez en un monto equivalente a 1.6 veces los vencimientos de deuda de 2018.

El único problema es que Pepe Toño puede ser víctima de su propio éxito. Ha sido tan eficiente su labor en Pemex, que podría limitarlo para ser el nuevo Secretario de Hacienda, en caso de que se confirme que José Antonio Meade se va al Banxico, en lugar de Carstens, o —todavía mejor— como candidato del PRI a la Presidencia.

Inflación sigue presionada

Buenas y malas en materia de inflación. En la primera quincena de julio subió 0.24%, menor al 0.31% que subió en 1a quincena de junio, por lo que se confirma una tendencia a la desaceleración. La mala noticia es que resultó mayor a lo que esperaban los analistas del mercado, al igual que la inflación subyacente que se elevó en 0.19%.

 

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