Talón de Aquiles de México: fragilidad institucional

A 16 días para iniciar la negociación de la primera ronda del Tratado de Libre Comercio con Norteamérica (Nafta), que tendrá lugar del 16 al 20 de agosto y se integrará por entre 7 y 9 rondas, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, no dejó vacío al nombrar a Kenneth Smith Ramos como jefe de la Negociación Técnica de México para la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Hay quien piensa que Guajardo no le está cediendo espacio a la Secretaría de Relaciones Exteriores, de Luis
Videgaray, pero en realidad, la estrategia que ha aprobado el presidente Peña Nieto es obvia: la relación bilateral amplia (incluyendo la comercial), pasa por la Cancillería, pero la relación comercial no revisa el tema de seguridad, de fronteras, de migración, ambiental, financiero, aduanal, salud, etc.

El canciller tiene acceso a canales de negociación y comunicación que no tienen otros, teje fino y lleva mano porque tiene hilado fino y tiene-toda-la-confianza del presidente Peña, como la tiene el propio Guajardo. El nombramiento de “Kenn”, como le dicen sus amigos, es inmejorable, su reto será poner la pena fuerte, el llevó solo la negociación de azúcar y es un fantasma, que no le apliquen azúcar reloaded.

Algunos suponían que el subsecretario de Comercio Exterior, Juan Carlos Baker, debiera ser el negociador en jefe, pero en realidad, con tantos “frentes de revisión comercial abiertos”, supongo que Guajardo sabe que se requiere de un negociador de tiempo completo para el NAFTA.

Su exjefe de oficina, Baker tiene tareas de seguimiento puntual del Acuerdo Global de México y la Unión Europea, y ahí Guajardo ha dejado como negociador de tiempo completo a César Guerra (representante de Asuntos Comerciales ante la UE) para afinar los temas técnicos con Helena Köning, la directora de comercio de la Unión Europea.

Regresando a Smith Ramos, está adscrito a la Embajada de México en Washington como representante de
Guajardo desde que inició la administración Peña y, ha estado presente e involucrado en toda negociación comercial incluyendo la de la caña, atún, acero, etc., además de haber sido un técnico clave en la negociación del TPP, que en su momento se consideró el Nafta ampliado.

Guajardo confía en Smith porque como el secretario mismo, ha sido parte de los equipos de negociación comercial desde hace 20 años, incluyendo el equipo original del que Guajardo formó parte con Jaime Serra y Herminio Blanco.

De esta forma, los tres equipos. Por México está
Ildefonso Guajardo, de Economía, apoyado en el equipo de Baker y Kenneth Smith, por Estados Unidos Wilbur Ross de Comercio y el representante comercial Robert Lighthizer
y; por Canadá, uno supondría que sería el ministro de Comercio Internacional, François-Philippe Champagn, pero el primer ministro Justin Trudeau nombró a la ministra de Asuntos Exteriores, Chrystia Freeland como responsable de la negociación.

De Fondos a Fondo

#EstocadaFinal a más 100 empresas de publicidad exterior. A pesar de que en 2010 en tiempos de Marcelo Ebrard, se creó y aprobó la Ley de Publicidad Exterior para la Ciudad de México, con el objetivo de regular, reordenar y meter en cintura al sector. A la fecha, tanto la Ley como el Reglamento han tenido diversas reformas, siendo las más recientes en julio de 2015 para la Ley, y julio de 2017 para el Reglamento.

Pese a esto, y mientras funcionarios como Salomón Chertorivski, secretario de Desarrollo Económico de la CDMX, tienen como bandera el atraer inversiones, crear empleos y aumentar el salario mínimo; en otras dependencias como la Seduvi, al mando de Felipe de Jesús Gutiérrez, se toman decisiones que ponen en jaque la supervivencia de alrededor de 100 empresas dedicadas a la publicidad exterior.

Se trata de un plan de reordenamiento que parece más bien un madruguete a la industria, la cual por cierto ostenta un valor de casi mil 500 millones de dólares al año, vía el reglamento de la ley de publicidad exterior para hacer un trabajo que no se ha hecho en 15 años en tan sólo 30 días, en donde tanto la Seduvi como el Invea, de Meyer Klip, intentan “convencer” que por cada cuatro anuncios que tenga una empresa, se queden sólo con uno.

Bajo dicha premisa y de acuerdo con el conteo del Padrón Oficial del gobierno de Miguel Ángel Mancera, existen cuatro mil 160 anuncios publicados de forma legal, pero más de cinco mil que operan en la ilegalidad, los cuales el propio Invea debió haber retirado desde hace varios años. Así, la meta sería dejar en la ciudad poco más de mil espectaculares, es decir, bajar alrededor de 266 anuncios diarios. Ahora imagine que en siete años no se ha avanzado en el tema.

Por otro lado, en el sector se piensa que está nueva jugada del gobierno de la CDMX tiene como objetivo el que queden pocas empresas en el sector, en donde, sin duda llaman la atención el poderoso empresario Ricardo Escoto Núñez, de Grupo Rentable; los hermanos Camou
Rodríguez, de Ipkon; así como firmas extranjeras de la talla de JCDecaux y Clear Channel, entre otras.

Así, y de acuerdo con el jefe de Gobierno, quien ha expresado la necesidad de transformar la publicidad en la capital, sería ideal este reordenamiento, pero siendo justo y equitativo, y no repartir el pastel en unos cuantos, lo que de entrada violaría el artículo 4º de la Ley de Publicidad Exterior, en donde indica que todos los anuncios tienen derecho a permanecer o ser reubicados conforme a las distancias, pero en ningún caso habla de una reducción.