Impide juzgado importación de papa de EU

Justo antes de que se inicien las renegociaciones del TLCAN, el próximo 16 de agosto, en Washington, el juez José Francisco Pérez Mier, del Juzgado Séptimo de Distrito en Sinaloa, otorgó el amparo a una demanda colectiva presentada por productores de papa, y ordenó a Sagarpa impedir la importación de papa  fresca proveniente de Estados Unidos por considerar que constituyen un riesgo latente a la biodiversidad, y el potencial riesgo de propagación de 63 plagas de riesgo alto, en detrimento del campo mexicano.

El juez calificó de inconstitucionales los artículos 54 y 55 del Reglamento de la Ley Federal de Sanidad Vegetal y el 9º transitorio, que se reformaron en julio de 2016, después de otro amparo ganado por los paperos en 2014.

Critica severamente no sólo a Sagarpa, sino también al gobierno mexicano por no haber incluido en el Reglamento medidas fitosanitarias específicas para mitigar el riesgo de la importación de papa fresca

Aunque no es la última instancia, sí es un importante revés para Sagarpa, para el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica)y para la Secretaría de Economía, que desde el sexenio pasado ha intentado abrir el mercado mexicano y se ha topado con la férrea y muy efectiva defensa de los paperos mexicanos afiliados a Conpapa.

Desde luego, quien sí está muy contento es Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario y quien como presidente de Conpapa encabezó la defensa jurídica de los paperos.

Por su parte, Sagarpa, encabezada por José Calzada, informó que al igual que Senasica, que dirige Enrique Sánchez Cruz, espera la notificación del Juzgado del Poder Judicial de la Federación y afirma que están en contra de los criterios del fallo. Adelanta que interpondrán recursos jurídicos y pasarán ahora a un Tribunal Colegiado.

La interrogante es cuál será el impacto de este caso en la renegociación del TLCAN en el capítulo agropecuario.

Meade, reconocimiento de Fitch

El Premio Naranja Dulce de la semana es para el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, porque entre las razones que argumentó Fitch para mejorar la perspectiva de la deuda de negativa a estable, es la capacidad de las autoridades para enfrentar retos como la caída en los precios del crudo; el riesgo de medidas proteccionistas por parte de Estados Unidos; y el avance en la consolidación fiscal y la estabilización en la deuda pública. Hay que recordar que cuando Meade llegó a la SHCP en septiembre, tanto Fitch como Moody’s y S&P pusieron en negativa la perspectiva de la deuda mexicana —antes del triunfo de Trump, la amenaza del proteccionismo y de una salida del TLCAN— por el mal crecimiento del déficit en relación al PIB, y el mal manejo de la deuda pública. En menos de un año y a pesar de la incertidumbre sobre el buen resultado de las renegociaciones del TLCAN, es muy buena noticia para la economía que la perspectiva de la deuda ya no sea negativa, que es un escalón previo a un descenso en la calificación.

Navarrete Prida como Pilatos

El Premio Limón Agrio es para el secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida, quien insiste en nadar de muertito en el tema del incremento al salario mínimo, como lo ha hecho desde hace dos años. En lugar de tomar una posición firme como debería ser tratándose de la STPS, mantiene una postura ambigua: por un lado, dice que es factible un incremento al salario mínimo antes de diciembre, pero por el otro, se lava las manos al afirmar que se requiere el consenso —que efectivamente no hay— en el sector patronal. Pero no hay de parte del secretario del Trabajo declaraciones claras sobre la necesidad de elevar el salario mínimo antes de diciembre, ante el crecimiento de la inflación que nulificó el aumento de 2016, que por vez primera tuvo dos componentes: un incremento generalizado de 3.9% más un aumento de cuatro pesos diarios, para totalizar 80.04 pesos por el nuevo concepto de Monto Independiente de Recuperación MIR.

El colmo es que Navarreta Prida diga que va de la mano con el jefe de Gobierno de la CDMX Miguel Ángel Mancera y con el presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, el único dirigente del sector privado que está a favor de un aumento al mínimo, en pesos, para elevarlo a 89.35 pesos.