Cómo evitaron el gasolinazo y la confusión

Fue el director de Pemex, José Antonio González Anaya, quien salió al quite: No habrá más gasolinazo, no habrá fuertes aumentos en los precios de las gasolinas para finales de año ni para principios de 2018.

Incluso de ahí se recordaron las palabras de José Antonio Meade, el secretario de Hacienda, quien ha repetido que el subsidio a las gasolinas sí se va a mantener. En otras palabras, los gasolineros de la Amegas se fueron con la finta, trataron de advertir algo que no va a suceder.

GASOLINAZO, EFECTO DE UNA SOLA VEZ

El gasolinazo fue de una sola vez. Fue el inicio de la liberalización del precio de las gasolinas. Y de ahí se fijaron precios máximos, es decir, la CRE y Hacienda determinan un precio de la gasolina según los precios internacionales, el impuesto (IEPS), los costos de transporte y el margen comercial. A los gasolineros se les da un precio máximo y ellos pueden jugar con los distintos niveles por debajo del precio máximo.

El inicio de esta modalidad sí provocó un alza en los precios de la gasolina y el diesel. Fue el gasolinazo que hubo en enero de 2017. Y tuvo sus costos, en inflación, que nos han llevado a una inflación de más de 6% anual. El gasolinazo fue un efecto de una sola vez. No más.

SUBSIDIO MEDIANTE IEPS SE MANTIENE

Y claro que el gobierno de Peña Nieto no quiere otro gasolinazo. De hecho, sigue jugando con el precio máximo de las gasolinas y el diesel. Y sigue subsidiando dicho precio, máxime cuando los costos internacionales de los combustibles se han elevado.

Incluso, el secretario de Hacienda, Meade, fue enfático: “El esquema que hemos tenido hoy de un proceso de flexibilización en donde vayamos suavizando, con los estímulos (subsidios), ha funcionado bien, y en principio deberíamos de preservarlos el siguiente año (2018)”. El subsidio a la gasolina, según nos recuerda Hacienda, ha sido de más de 30 mil millones de pesos a junio de 2017.

MIENTRAS TANTO, CRE AVANZA EN PERMITIR IMPORTACIÓN

Sin embargo, la Comisión Reguladora de Energía ha seguido su proceso de liberación del precio a escala nacional.

Se trata de regiones donde ya se pueden importar combustibles, independientes de los de Pemex. Y la CRE, presidida por Guillermo García Alcocer, acaba de dar a conocer que va a adelantar las regiones del sur y sureste para lograr que todo el país esté listo para liberar el precio y utilizar combustibles importados, independientes de Pemex.

La CRE lo ha hecho de manera cuidada, y ahí están las regiones donde no han existido grandes saltos en los precios de las gasolinas. Sin embargo, al ver esta noticia de la CRE, una de las asociaciones de gasolineros se fue con la finta.

Se trata de Amegas, la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros, que, en voz de su presidente, Pablo González, dijeron que otro gasolinazo sí podría venir. Hablaron de que los precios de los combustibles se han incrementado en los mercados internacionales y las importaciones saldrían más caras.

ONEXPO, DISTINTA A AMEGAS

Sin embargo, no necesariamente es así. Insistimos: el costo de la gasolina depende del impuesto (IEPS), donde actúa Hacienda al suavizar los precios.

Dicho subsidio va a continuar. Y sí podremos ver deslizamientos en los precios de las gasolinas, pero ni de lejos nada parecido al gasolinazo.

Es más. La Onexpo, la gran organización de expendedores de gasolina, en voz de su presidente, Roberto Díaz de León, señaló que le confirmaron que el proceso de liberación de precios de gasolinas y diesel seguirá siendo un proceso ordenado. “No habrá cambios abruptos”.

En otras palabras, Hacienda mantendrá el subsidio sobre el impuesto cobrado a las gasolinas y el diesel, y no habrá otro gasolinazo. ¿Nos cuesta ese subsidio? Desde luego, pero la liberación del precio debe ser un proceso ordenado. El primer golpe de liberación, el de este año con el gasolinazo, ya tuvo su impacto inflacionario. No se quiere nada similar. Menos en un año de renegociación del TLCAN y campañas presidenciales.