¿A quién se le olvidó la locomotora?

El descarrilamiento del tren al aproximarse en un patio de Orizaba, Veracruz, sólo muestra la dimensión del grave problema de seguridad que enfrenta la infraestructura de vías de comunicación en el país, donde la tierra de nadie le abonaron, los diputados que se opusieron a aumentar las penas corporales y pecuniarias para quienes se dedican a robar, secuestra, sustraer, descarrilar, asaltar, al transporte de carga y pasaje que circula por las vías generales de circulación.

Sólo el año pasado, la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario, que encabeza Benjamín Alemán, en su informe de seguridad, reporta que el año pasado se registraron mil 752 robos y/actos de vandalismo a trenes, siendo Veracruz, Puebla, Guanajuato, Querétaro y Coahuila los que reportan más de 100 incidentes, derivados de 10 mil 867 actos de vandalismo que van desde el cierre de angulares (el más usado), robo de componentes de unidades de arrastre, división de trenes y ruptura de los componentes de frenos, obstrucción intencionada en la vía.

Y el escandaloso descarrilamiento del fin de semana en Orizaba, originado en que una locomotora de servicio para maniobras de acomodamiento de trenes y carros se quedó sobre la vía principal, lo que no debió ocurrir dado que el jefe de patio debió ordenarle que se moviera porque venía el tren, aunque parece no ser sabotaje, se suma a otros seis incidentes de vandalismo y robo que han ocurrido sobre las vías de Ferrosur en la frontera entre Veracruz y Puebla desde el 28 de abril a la fecha.

Las operaciones sobre las vías del tren las vigila e investiga el Grupo de Control de Instalaciones Estratégicas de la Comisión Nacional de Seguridad, que encabeza Renato Sales, y si bien la custodia, desde su nacimiento en 2013, la realizan integrantes de la Gendarmería Nacional, a cargo de Benjamín Grajeda, pareciera que carece de capacidad para detener la impresionante cifra negra que se ha movido en estas entidades curiosamente gobernadas por el PAN: (Veracruz, Puebla, Guanajuato) y una por el PRI (Tlaxcala), y donde lo que saquean tan pronto un tren se para en o cerca de una zona urbana son granos, cereales, harinas, abarrotes, azúcar, vinos y licores, polietileno, automóviles o partes automotrices y material de construcción, estos productos que se desplazan en los mercados informales de consumo en México.

En el caso de Ferromex-Ferrosur, estos actos de vandalismo y sabotaje han tenido un importe de 25 millones de pesos, sin contar con el equipo dañado. En todo el país, en lo que va del año han reportado mil 900 carros con robo y en Puebla, en el peor mes robaron 382 carros, mientras que en Veracruz la suma aumenta.

Acaso usted se puede preguntar, como tal vez lo hago yo, ¿qué es lo que sucede con la capacidad de investigación y sanción del Estado? Es cierto, la iniciativa de ley que incrementaba las penas corporales y pecuniarias a quienes atenten contra las vías generales de comunicación y roben mercancía o a personas en el transporte público, para que no puedan salir bajo fianza tan pronto los detienen, pero mientras esta práctica sea un ejercicio de rutina, pues mire, seguirá siendo tema de debate y muestra de impunidad pública. Sabe quién votó por el no. Los senadores del grupo parlamentario de Morena que coordina Manuel Bartlett, con uno de esos argumentos tipo Robin Hood.

DE FONDOS A FONDO

#AINDA… Dicen que el que persevera alcanza, pero el que se compromete con el inversionista seguramente será el que tome mayor ventaja de la etapa que se aproxima en México en materia de infraestructura público-privada. Hoy se realiza en la Bolsa Mexicana de Valores, que dirige Oriol Bosch, la ceremonia del campanazo del CKD de Ainda Energía & Infraestructura, la propuesta que preside Óscar de Buen y dirige Manuel Rodríguez Arregui, que ha logrado convencer, por su estructura, equipo, conocimiento y estándares de referencia utilizados, de su rol actual y futuro como uno de los socios estratégicos clave para el desarrollo de infraestructura de energía, carretera, puertos, aeropuertos, independientemente del color que tenga el próximo gobierno. ¡Enhorabuena!

#SubsidiosAéreos… La reciente decisión de Aeroméxico, que lleva Andrés Conesa, para suspender el inicio de la ruta México-Barcelona anunciada para noviembre próximo, está alineada con lo que otras empresas, como su socio Delta, de Edward Bastian, han realizado en el mercado norteamericano desde hace ya varios años.

El gobierno estadunidense y canadiense se convencieron de que Qatar, Emirates y Etihad operan con costos subsidiados en rutas densas ocasionando una competencia desleal con las aerolíneas domésticas que han tenido que frenar sus planes de expansión principalmente en el mercado europeo.

Lo que llama la atención que el MOU se haya firmado en 2016, autorizando las quintas libertades hasta 2018.

Las árabes realizan escala en ciudades como Barcelona, Milán, Lisboa y Estocolmo. En el caso particular de México, la prisa de Emirates para realizar vuelos hacia acá tiene que ver con el plazo de vencimiento que menciona el memorándum de entendimiento firmado entre México y los Emiratos Árabes de diciembre de 2016, que señala deberán de ejercer los derechos de tráfico antes del 8 de diciembre de 2018.

La única razón por la cual este plazo podría extenderse es si no existiese un espacio –slot– en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Le puedo confirmar que ese slot ya está previsto para la temporada de invierno de 2018.

Por supuesto que al país le interesan más pasajeros, más ingresos por divisas, pero la pregunta es si la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, de Gerardo Ruiz, le podría interesar sopesar las consecuencias y distorsiones que puede introducir al mercado mexicano de enlace internacional estas empresas. Hoy es Aeroméxico, mañana puede ser cualquier otra línea aérea con bandera mexicana.