¿Está tu empresa preparada para enfrentar la depreciación?

Estamos viviendo una época de cambios constantes en las economías mundiales, todos los días escuchamos noticias sobre la situación en Grecia, la devaluación de la moneda china, el tipo de cambio del dólar en aumento, etc.

Todas estas situaciones invariablemente afectan a nuestro país y no podemos estar ajenos o mantenernos al margen, de un modo u otro, esta situación impacta de manera directa a nuestras empresas, iniciamos el 2015 con un tipo de cambio de 14.7348 pesos por dólar y cerramos el mes de agosto con un tipo de cambio a 16.7684 pesos. Por ello, es indispensable conocer en qué lugar nos encontramos y cómo podemos hacer frente para mitigar, en lo posible, el efecto de las depreciaciones que estamos viviendo, o en su caso, si tenemos operaciones de exportación o ingresos en dólares, conocer las ventajas que esto genera.

En estos análisis debemos tomar en cuenta no sólo el efecto de las fluctuaciones cambiarias como un factor único, ya que al mismo tiempo que el dólar está aumentando de precio, otros productos como el acero, el petróleo, entre otro, han estado disminuyendo sus precios, estos productos, por su relevancia en la actividad productiva, compensan, en parte, el efecto de la devaluación y evitan en cierta manera una posible inflación.

Para dar algunos ejemplos, las empresas industriales cuya materia prima es de importación, el efecto será un aumento en sus costos de producción, mientras su mano de obra y sus gastos indirectos se mantendrán por el momento estables; aquí es donde cobra relevancia el control interno y las políticas de costos que tengan cada una de este tipo de empresas, ya que de no existir o ser deficiente, será más complejo actuar de manera rápida y correcta.

Sin embargo, si el control es bueno y sus políticas de precios prevén estas posibles variaciones de tipo de cambio, podrán sostener sus precios por lo menos el resto del año. Quizás tendrán alguna disminución en sus utilidades pero el efecto será sostenible.

En otro caso, las empresas que importan productos solo para distribución tendrán un efecto directo en el precio de dichos productos, en este sentido estas empresas, en la mayoría de los casos, estarán obligadas a subir el precio y con ello correr el riesgo de salir del mercado o mantener el precio teniendo pocas utilidades o pérdidas.

Como podemos observar en los ejemplos anteriores si hablamos de dos empresas diferentes que se dedican al mismo giro, la primera tendrá mejores oportunidades de afrontar la crisis que la segunda; tendrá también oportunidad de ganar mercado si es que la otra decide aumentar sus precios. Si a esto le aumentamos que la primera empresa exporte sus productos, en este momento tendrá mejores resultados.

Otro tipo de empresas son las que producen todo en el país con materias primas nacionales y todos sus productos, o la mayoría son para exportación, este es un momento muy favorable para tener resultados muy positivos.

Definitivamente cada empresa y giro es diferente y tiene efectos desde los más simples hasta los más complejos, los ejemplos mostrados son de manera general y dependerá de cada organización afrontar la situación de la mejor manera, lo que podemos recomendar es tener un control interno adecuado, información inmediata y confiable para tener mayor certeza en la toma de decisiones, no podemos decir que lo anterior resuelve el problema, pero por lo menos estaremos mejor preparados para afrontarlo.