5 tips financieros para los solteros que desean vivir en pareja

De finanzas y otros demonios -
Los solteros que planean tener pareja en el futuro tienen la gran ventaja de poder prepararse de antemano para no cometer grandes errores que después es muy difícil corregir. Foto: Flickr de Anshum Mandore CC [CC BY-NC-SA 2.0]
Los solteros que planean tener pareja en el futuro tienen la gran ventaja de poder prepararse de antemano para no cometer grandes errores que después es muy difícil corregir. Foto: Flickr de Anshum Mandore CC [CC BY-NC-SA 2.0]

Vas manejando tranquilamente por la carretera y de pronto pierdes el control. Frente a ti hay solamente dos opciones: chocar contra un árbol frondoso o contra un muro. ¿Cuál elegirías?

En los instantes anteriores a un choque no hay tiempo de buscar la respuesta en Internet.*(Mira la respuesta al final del artículo) La vida en pareja es muy parecida. Desde la primera mirada tímida hasta que se rasuran juntos en el baño, los enamorados toman cientos de decisiones rápidas que determinarán el futuro de la relación; y el momento para preparase es hoy, que estás soltero.

Por ejemplo, estás mudándote al apartamento con tu pareja (que gana el doble que tú) y de pronto él te pregunta si te parece bien dividir los gastos a la mitad. En lugar de decirle que comprarás un libro sobre el tema y le responderás en dos semanas, seguramente le dirás que te parece perfecto. En cambio, si te has preparado previamente, sugerirás una división proporcional: los dos aportan un porcentaje de acuerdo con sus ingresos.

Una de las principales causas de divorcio es el dinero. Los solteros que planean tener pareja en el futuro tienen la gran ventaja de poder prepararse de antemano para no cometer grandes errores que después es muy difícil corregir. Tu objetivo debe ser que el dinero sea una herramienta y no un obstáculo para tu futura relación. He aquí cinco preparativos que debes realizar:

1. Evitar las deudas

Cuando el amor llega a tu vida, la mejor forma de recibirlo es siendo una persona libre de esclavitud. Disfrutarás mucho más esa etapa y podrás hacer planes a futuro sin la temible sombra de compromisos financieros abrumadores. Lo peor que les puede pasar a los enamorados es financiar el amor, es decir, las citas, viajes, boda, enseres domésticos o la llegada de los hijos, con dinero que no es suyo.

2. Fondo de emergencias y finanzas sanas

¿Qué te parecería si acabas de conocer al amor de tu vida, pero te pide prestado porque chocó el coche y no tiene para pagar el deducible? Yo saldría corriendo, porque sé que la gente administrada tiene fondos de emergencias, y no me interesaría complicar mi vida romántica uniéndome a un adulto con finanzas de niño chiquito.

Serás una mejor pareja si desde hoy aprendes a gastar menos de lo que ganas y administrar e invertir tu dinero. Atrae la madurez que deseas en una pareja empezando por tu propia madurez.

3. La prueba de la sinceridad financiera

Debes acostumbrarte a hablar de dinero con tus papás y amigos, para sentirte más cómodo hablando de dinero con tu futura pareja. Una relación con fidelidad financiera permite unir energías y lograr mucho más que la suma de sus esfuerzos individuales.

Mi amigo Hernán conserva en su oficina una caja de cartón con sus recibos de pago de los últimos diez años. “Es que mi esposa es muy gastalona y es mejor si no sabe cuánto gano”.

Es muy mala señal cuando estás en una relación y no sientes que puedes ser sincero con tu pareja con respecto a tus gastos, ingresos o inversiones. Puede ser tu culpa, si no tienes finanzas sanas, o puede que el comportamiento de tu pareja no te inspire confianza.

Cualquiera que sea el caso, trabaja desde hoy para prevenir este problema, siendo digno de confianza y rodeándote de gente confiable. Es terrible tener que mentirle o esconderle dinero a la persona que amas durante toda la vida, y los efectos se harán sentir en tu relación y en tus finanzas.

4. Tener claras tus metas y el tipo de pareja que quieres formar

Si entras a una relación sin saber lo que quieres, es muy posible que confundas los sueños de tu pareja con los tuyos. Por lo tanto, es muy importante que tengas claro qué quieres lograr en la vida y los recursos financieros que necesitarás para llegar hasta ahí. De esta manera, tu pareja y tú podrán ayudarse en la realización de los sueños de cada uno.

En cuanto a las finanzas del hogar, existen muchas personas atrapadas en parejas con arreglos económicos que les dan poca libertad o autonomía y otras que, por el contrario, sufren porque sobre ellas recae la carga económica de todo el hogar. Es necesario que, desde hoy, decidas si estarías cómodo siendo el proveedor principal, o dedicándote al hogar; si conviene que ambos junten sus recursos, que cada quien tenga sus propias cuentas o una mezcla de ambas opciones.

Es importante que definas tus límites, por ejemplo, ¿te casarías con un apostador compulsivo? ¿soportarías vivir con un tacaño terco? ¿aguantarías la vida junto a un comprador compulsivo? Al determinar lo que aceptarías y no aceptarías en una relación, estás estableciendo límites que te ayudarán a construir una mejor vida de pareja, en el futuro.

5. Resolver tu equipaje familiar

Algunos entran a una relación con hijos y pensiones alimenticias por pagar. Asimismo, algunas familias esperan que los hijos apoyen a los padres económicamente, y esto puede ser fuente de mucho estrés o disgustos en una pareja. Independientemente de las expectativas familiares, si tus padres no tienen derecho a una pensión o ingreso regular durante su vejez, la ley en México indica que pueden demandarte para recibir ayuda económica.

Por ello, es importante que planees desde hoy cómo afrontarás los compromisos financieros familiares. Por ejemplo, puedes contribuir mensualmente a un fondo de inversión para tus hijos, o un plan de jubilación para tus padres, o ayudarles a aumentar su pensión del IMSS a través de contribuciones a la modalidad 40. Lo más importante es que planees desde hoy  para reducir lo más posible el impacto de tus obligaciones familiares en tu vida en pareja.

*La presión se divide entre los puntos a los cuales se les aplica una fuerza, y por lo tanto, es mejor pegarle al muro (que sería como una cama de clavos) que al árbol (que se comportaría como un cuchillo, pues todo el golpe se concentraría en su estrecha superficie).

*DR

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.
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