Las 3 cosas que el dinero sí puede hacer por ti si se lo permites

CIUDAD DE MÉXICO.- En la publicación anterior “Las tres cosas que el dinero no puede hacer por ti”, describí tres expectativas erróneas que tenemos del dinero, basando los ejemplos en el caso remotísimo de ganarnos la lotería.

Ahora, para demostrar las tres cosas que el dinero sí puede hacer por ti, será necesario visualizar el escenario opuesto, un golpe económico mucho más probable: perder el trabajo.

De hecho, a finales del año pasado nos sucedió a mí y a todos mis compañeros de oficina. Después de más de cinco años trabajando para el gobierno estatal, un recorte de personal nos quitó nuestros puestos repentinamente. ¿Qué harías tú si perdieras el trabajo? ¿Cómo lo enfrentarías? ¿Te ha pasado? ¿Qué sentiste? Perder el empleo no tiene por qué ser una experiencia desagradable ni representar un golpe económico fuerte, si conoces las tres cosas que el dinero puede hacer por ti.

1. El dinero sirve para no preocuparse por él

Mi marido y yo tenemos un ingreso diversificado, pues además de nuestros empleos hacemos trabajo freelance de vez en cuando. Esto no es nuevo, siempre hay gente muy activa que incluso “vende pozole los domingos”. El empleo que perdí representaba solo el 35% de los ingresos familiares. Pero si gastáramos el 100% de esos ingresos, o si tuviéramos deudas, la pérdida de mi empleo hubiera implicado privaciones y angustias. Afortunadamente, mi esposo y yo evitamos endeudarnos y estamos acostumbrados a vivir de un solo sueldo.

Gracias a esta estrategia, no hemos pasado un solo segundo de nuestro matrimonio preocupados por dinero. Cuando hablamos de finanzas, lo hacemos con entusiasmo y agradecimiento. Muchos gastan hasta el último centavo en comodidades, preocupados por la escasez, pero nosotros vivimos de manera sencilla en un mundo que nos parece abundante de posibilidades. El dinero sirve para no preocuparse por él. Si estás preocupado, no lo estás usando bien.

3. El dinero puede darte libertad

Aunque disfrutaba mi trabajo, también comenzaba a resentir la falta de tiempo libre. El despido fue el momento perfecto para darme una pausa y dedicarme a escribir, hacer más ejercicio, leer, viajar, ver a mis amigos y probar nuevas fuentes de ingresos.

Pero es difícil sentirse libre para explorar opciones y oportunidades cuando no tienes ahorros y sí tienes compromisos financieros. Hace poco, una amiga de veintidós años decidió irse de aventura con un grupo de ciclistas: recorrerán desde México hasta Argentina en bicicleta. Muchos le dijeron: hazlo ahora, porque después ya no podrás. Lo que tratan de decirle es que, mientras sea hija de familia y pueda volver a casa de sus padres, es libre de tomarse un tiempo sin responsabilidades. Pero esto es una falacia. Mi marido y yo somos tan libres como ella, pues aunque vivimos independientemente y tenemos cuentas por pagar, también tenemos la libertad que da un colchón de ahorros. Si quisiera, podría irme pedaleando por medio continente, pero no está en mis planes orinar junto a la carretera con un embudo, para que no se me suban las chinches. Pero le deseo a mi amiga mucha suerte en su aventura y que conserve su libertad toda la vida, no sÓlo durante la juventud.

2. El dinero puede darte felicidad

El dinero tiene mala fama porque abundan los ricos infelices. También porque se dice que las cosas más valiosas de la vida no tienen precio, y muchos entienden que el dinero no tiene relación con la felicidad.

La realidad es que tus recursos deben estar al servicio de lo más importante de tu vida; deben ser un esclavo sin voz ni voto en los aspectos más entrañables de la existencia: el tiempo que le dedicas a tu familia y amigos, tu profesión, salud, y satisfacción con la vida. Y esto se logra cuando se conserva el dinero en lugar de gastarlo en cosas superfluas.

Pero si en lugar de ahorrar e invertir te rodeas de confort, entonces el dinero se convierte en un obstáculo. Cada vez que encareces tu vida con lujos y comodidades, tienes que trabajar más duro para mantenerte, y te pones en una situación más vulnerable ante los reveses de la vida como accidentes, enfermedades, despidos y divorcios.

En resumen, las tres cosas que sí podemos esperar del dinero, cuando lo ahorramos e invertimos, son: tranquilidad, libertad y la satisfacción de saber que el dinero está al servicio de tu felicidad.

*DR