Los costos de la violencia en México

El país está sufriendo una situación de violencia y falta del estado de derecho que parece haberse salido de control y no tener una solución fácil a corto plazo. Se han hecho múltiples manifestaciones en las últimas semanas tanto a nivel nacional, como internacional, mostrando la preocupación de la sociedad al respecto. Esto da a notar que a nivel internacional, México está llamando la atención por una situación de ingobernabilidad y violencia que lo hacen poco atractivo tanto para el turismo, como para la inversión.

Anteriormente ya se han hecho intentos por medir las consecuencias económicas de la violencia en nuestro país. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo los cálculos de los costos económicos de la violencia han sido más numerosos, dando una mejor idea del costo monetario de la actual situación de inseguridad.

El Instituto de Economía y Paz estimó que en el caso de México, el costo directo de la violencia es de 3.8% del PIB, a la vez que el costo indirecto se estima en 12% del producto, dando como resultado un costo total de 15.8% del PIB. Los investigadores de este instituto calculan que, bajo condiciones óptimas y con un escenario sin violencia en México, la economía podría tener una mejora potencial de cerca 27% del PIB. Asimismo, su estudio arroja que los estados más pacíficos han experimentado un crecimiento anual del PIB de más del doble que los estados menos pacíficos a lo largo de la última década.

Si bien el resultado obtenido parece ser muy alto, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) en 2011 ya había mostrado que el costo de la violencia en el país era de cerca del 15% del PIB, cifra cercana a la del estudio más reciente.

De igual forma, El Instituto para la Seguridad y la Democracia hace un estudio muy completo, en el que añaden una muy buena revisión sobre todos los estudios de violencia del país. Ponderan que en el caso de México, si se incrementa la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes en zonas de tráfico de drogas disminuye los ingresos municipales. Además, calcularon que el aumento de 10 homicidios por cada 100,000 habitantes genera:

- Una disminución de entre dos y tres puntos porcentuales de la proporción de personas en un municipio trabajando en el mismo trimestre y siguiente periodo, respectivamente.

- Un aumento de cerca de 1.5 punto porcentual en la proporción de personas desocupadas en un municipio.

- Una disminución de la proporción de personas propietarias de un negocio (como lo define INEGI) en un municipio de cerca de 0.4 puntos porcentuales.

- Una disminución de la proporción de personas autoempleadas (como lo define INEGI) en un municipio de cerca de 0.5 puntos porcentuales.

Es claro que la violencia y los sectores ilícitos en una economía acarrean altos costos tanto económicos, como sociales. Estos reducen la formación del capital humano, el turismo y la inversión extranjera y nacional (como se ha visto con la migración de varias empresas en estados del país con mayor violencia). Asimismo, deterioran y marginan más a grupos ya vulnerables. Es por ello que es menester que se busque, en conjunto sociedad y Estado, una alternativa ante este escenario de violencia que amenaza con tener más víctimas cada día. 

*gl