¿Vivir para ahorrar o ahorrar para vivir?

Descubre cómo se mueve tu mundo -
Ahorrar se vuelve importante conforme crecemos, pero porque ahorrar implica pensar en nuestro futuro y bienestar. Foto: Visual Hunt
Ahorrar se vuelve importante conforme crecemos, pero porque ahorrar implica pensar en nuestro futuro y bienestar. Foto: Visual Hunt

En México hay muchas maneras en las que las personas ahorramos. Algunos desde niños comenzamos a llenar nuestra alcancía que ganamos en alguna feria, algunos otros tenemos padres que nos crean cuentas de ahorro en algún banco y nos incentivan a ahorrar nuestros domingos, pero rara vez nos dicen por qué es importante ahorrar.

Muchos niños guardan su dinero para comprarse juguetes, dulces, o alguna otra cosa que creen necesitar, por lo que su ahorro nunca llega a ser lo suficientemente grande como para pensar en usarlo en el futuro. 

Ahorrar se vuelve importante conforme crecemos, pero porque ahorrar implica pensar en nuestro futuro y bienestar.

Yo, por ejemplo, empecé a ahorrar desde muy pequeña, gracias a que mis papás me abrieron una cuenta en un banco que en aquel entonces se llamaba Bital, en él podías elegir el color de tu tarjeta y no cobraban nada por usar la cuenta. Recuerdo bien que me encantaba ir a depositar dinero aunque quienes hacían uso de mi ahorro eran mis papás a través de pequeños préstamos.

Mi ahorro se vio mermado debido al uso que hicieron mis padres de él, pero el hábito del ahorro no. Aprendí a guardar parte de mi dinero y sé que podría ahorrar mucho más si dejara de malgastar o tomar decisiones aceleradas.

Para que un mexicano pueda ahorrar, primero tiene que poder cubrir sus necesidades básicas y en este país 53.3% gana apenas lo suficiente para vivir, por lo que el ahorro no forma parte de sus prioridades. Sin embargo es fundamental si queremos pensar en adquirir algún bien, en sobrevivir a un imprevisto o simplemente para no depender de nadie al llegar a nuestra vejez.

Economizar nuestros recursos es difícil y culturalmente en México pocas veces nuestro ahorro llega a alguna institución financiera, ya que o le entramos a la tanda, o le prestamos a algún amigo o lo escondemos en diferentes partes de la casa para cuando se ofrezca, pero casi nunca pensamos en que ese dinero puede o podría crecer.

Si una persona guardara todos los días una moneda de diez pesos durante 35 años, llegaría a juntar 127,750 pesos, pero si estos diez pesos se invirtieran en una cuenta para el retiro; el rendimiento sería mucho mayor, lo que probamente garantizaría una vejez tranquila.

Los jóvenes, y me incluyo, pocas veces llegamos a pensar en qué pasará cuando seamos adultos mayores, pues consideramos muy lejano ese día. Actualmente los ancianos ya no gozan de las prodigiosas pensiones que alguna vez pensaron tener o que generaciones pasadas aún conservan, por lo que algunas veces tienen que depender de sus hijos: nosotros. ¿Y entonces, cómo hacemos para ahorrar si ahora tenemos que pensar no sólo en nuestro retiro sino también en el de nuestros padres?

Es un círculo vicioso y para salir de él tenemos que empezar a actuar ya, ahorrar sin importar cuánto ganas, si es informalmente, en alguna tanda, o si es en alguna institución financiera, lo importante es comenzar a guardar parte de nuestros recursos para protegernos y poder construirnos un futuro.

Destinar cierta parte de nuestro dinero al ahorro puede convertirse en un hábito y conforme crezcamos guardar cantidades más grandes que nos permitan hacer planes y que en vez de pedir prestado, nosotros podamos prestar a alguien más, sin angustiarnos por nuestro futuro y poder vivir nuestro presente sin preocupaciones.

En el MIDE, por ejemplo, hay una exposición temporal que nos habla sobre la importancia del ahorro en las mujeres, ya que tenemos desventaja frente a los hombres. Esta exhibición es una invitación para todos nuestros visitantes en general, para que piensen en su futuro, y sobre todo, para que tomen decisiones informadas respecto a él.

Tómenlo como una invitación a visitarnos y descubrir una forma diferente de abordar este tema que nos concierne a todos, que es parte de nuestro día a día y que no debemos dejar para después, pues estamos a tiempo para comenzar a actuar y decidir cómo queremos vivir.

- Daniela Brandt.- Editora de Contenidos MIDE, Museo Interactivo de Economía

*livm

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.
Icono de te puede interesar de en dineroenimagen

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR