Cómo impacta en las empresas el tema del matrimonio igualitario

El pasado fin de semana, y durante varios días, se sostuvo una polémica que aún no termina sobre el rechazo de un sector de la sociedad a la modificación del Código Civil Federal en el tema del matrimonio civil y la ratificación de la Suprema Corte de Justicia donde se establece el matrimonio igualitario como un derecho humano integrado al marco constitucional mexicano.

No será materia de esta columna validar una u otra posición, sino analizar uno de los costos que conlleva dentro de las empresas la cultura de discriminación y rechazo.

A favor o en contra, la realidad es que en el mundo actual es mucho más frecuente y por lo tanto se vuelve necesario que las empresas implementen estrategias para promover el respeto hacia las personas de la comunidad LGBTTTI y el impacto que tiene para muchas no contar con éstas.

En 2014 la Alianza por la Diversidad y la Inclusión Laboral (ADIL) realizó una encuesta sobre el tema y la experiencia de homofobia y transfobia en el trabajo en donde participaron empresas como Accenture, American Express, Dow Química, Microsoft, Scotiabank, General Electric, Google, J.P. Morgan, Banamex, IBM, entre otras que prefirieron no ser mencionadas.

Entre los resultados a destacar mencionan que el 45% de los empleados ha sentido intimidación y hostigamiento en su ambiente laboral y el 35% de los participantes de la encuesta mencionaron haber experimentado o atestiguado discriminación por orientación sexual.

Sin embargo, en las empresas donde se han implementado políticas de inclusión, el 85% de los empleados manifestó querer permanecer en la empresa por un periodo mayor a 3 años, lo que habla de la confianza y estabilidad que genera en la persona y el grado de fidelidad del trabajador con respecto a su empresa. Lo hace sentir que la empresa lo toma en cuenta sin importar su preferencia y por lo tanto el empleado retribuirá esta iniciativa permaneciendo en ella más tiempo, logrando disminuir los índices de rotación de personal.

Un punto de gran importancia en la empresa es que las personas se perciben más productivas en empresas que implementan políticas de inclusión laboral ya que el ambiente en los equipos de trabajo es mucho más relajado y las personas LGBT se sienten aceptados y reducen los niveles de estrés al evitar tener que justificarse ante los demás al expresarse libremente sobre su vida privada, además de ver una oportunidad de crecimiento laboral, lo que facilita las relaciones interpersonales en un ambiente de trabajo cordial y respetuoso.

Si bien es un tema difícil de tratar, las empresas están obligadas a aceptar una realidad que no sólo está sucediendo sino que además les está costando literalmente, al desperdiciar oportunidades para fomentar la fidelidad de los empleados mediante la creación de un sentido de pertenencia y orgullo por trabajar en una empresa incluyente que pone como estándar los resultados y no las preferencias sexuales, o condiciones de raza, género, etc.

La discriminación en todos los sentidos cuesta y todos nos tenemos que dar cuenta de esto, se trata de un tema de respeto por la otra persona. Sin embargo, no todo está del lado de las empresas, también está en la cancha de los empleados, en donde todos podemos hacer algo para eliminar el concepto de que alguien es superior a otra persona por algún tipo de condición o elección. Debemos madurar como sociedad y aceptar que mi libertad de elección es la misma que el de la de la otra persona y que cada una tiene derechos que no pueden ser negados bajo ninguna circunstancia.

Y tú, ¿has sufrido algún tipo de discriminación laboral?

Nos leemos la próxima vez…

Para conocer más detalle sobre la encuesta realizada por ADIL, les comparto este enlace: http://www.adilmexico.com/wp-content/uploads/2015/09/2daEncuestaADIL2015...

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