Tu letra revela si eres feliz en tu trabajo o ya debes cambiar

Dicen que el dinero no compra la felicidad, y es cierto; aunque es una parte fundamental para el buen desempeño laboral, muchas veces tener un buen sueldo no es suficiente para que un empleado permanezca en una empresa.

Hay ejemplos de gente que decide quedarse en un empleo por otros motivos que van más allá de una buena oferta económica y como la letra es reflejo de nuestra forma de ser, también se ve cuando una persona está satisfecha con su ambiente laboral o busca desesperadamente un cambio.

Aquí tres ejemplos de por qué la gente decide quedarse (o irse) de una empresa y cómo lo manifiesta en su forma de escribir:

Motivación

Uno de los principales factores que mantienen a una persona en un empleo es la motivación, si todos los días despiertas pensando que no quieres ir a trabajar o que te choca lo que haces, es probable que necesites un cambio. Una persona motivada en general es una persona muy segura de sí misma y con inteligencia emocional. Incluso puede llegar al extremo y catalogarse como soberbio y/o ególatra. Es una persona muy competitiva, de alto grado de inteligencia y astucia, gran creatividad e iniciativa que se ve reflejada en su trabajo.

Este tipo de personas tendrán una escritura que tiende a ser muy grande, donde la firma destaca del texto. Predominará el tipo de escritura con ángulos y poco redondeada. Puede escribir la barra de la “t” por encima de la parte media y en forma de sable. Tenderá a escribir en forma rápida y con tendencia hacia arriba y hacia la derecha, manteniendo la presión firme.

Reconocimiento

Puedes tener el mejor desempeño laboral y una buena compensación económica, pero si no hay reconocimiento de tus superiores o de tus pares, es probable que no te encuentres feliz en tu empleo.

El reconocimiento de los demás forma parte de nuestro sentido de pertenencia, de ser parte del grupo y sentirnos integrados. Alguien que no cuenta con este reconocimiento es etiquetado como la víctima en la organización, busca siempre ganarse el afecto de sus compañeros a través de provocar compasión o lástima. Es de los que piensan que todo lo malo le pasa a él y este tipo de pensamientos suele molestar a los demás cayendo de la gracia de sus compañeros y seguramente no desarrolla su potencial al 100%.

Esta persona mostrará una escritura débil, como el comportamiento de la persona, de tamaño pequeño y rebajado, incluso la firma puede ser mucho más pequeña que el texto. Puede mostrar una inclinación hacia la izquierda y un exceso de formas redondeadas. Escribirá muy lentamente y tenderá hacia abajo, mostrará síntomas de ansiedad reflejadas en palabras apretadas o dejando grandes espacios en blanco.

Confianza

Es la base de cualquier relación y la laboral no se escapa de ello, una persona que pierde la confianza en su equipo y en su empresa se vuelve contra ella y puede ser contaminante para el resto del grupo. Se convierte en un personaje misterioso y ajeno, manipula y utiliza a los otros para conseguir sus objetivos. Tienen maneras para manipular la información a su conveniencia y generalmente están bien informados, incluso antes que los directamente involucrados. Son ambiciosos, desconfiados e individualistas.

Las personas que crean un ambiente de intriga tienen una escritura desligada, es decir separada entre letras y palabras, hay incoherencia entre el texto y la firma, es decir no muestran relación. La ambición se reflejará en una escritura ascendente resaltando las mayúsculas que tienden a ser muy grandes, el egoísmo se presentará en letras con rasgos envolventes y escritura regresiva. Tenderá a realizar letras adornadas con óvalos de doble vuelta. La firma será ilegible o envuelta en capas lo que demostrará sus intenciones ocultas.

Y tú ¿cómo escribes? ¿tu letra dice que es urgente buscar un cambio? Escribe unas líneas sobre un tema relacionado con tu trabajo para analizar si para el 2016, si requieres asesoría no dejes de comentar, en una de esas podrás decir: “Año Nuevo, Trabajo Nuevo”.

Nos leemos la próxima vez…