¿Cómo preparar nuestra muerte en vida? Aquí unos tips

Un día… -
El fallecimiento es un tema que en nuestra cultura es poco comentado entre las familias. Foto: Flickr
El fallecimiento es un tema que en nuestra cultura es poco comentado entre las familias. Foto: Flickr

Sólo para recordar, “Un día…” es un concepto que busca apoyarnos en la planeación y mejor preparación de las posibles eventualidades a las que todos estamos expuestos todos los días, ya que seguramente un día enfrentaremos algo como el fallecimiento, o la invalidez, o la pérdida del empleo o del ingreso, y si sobrevivimos a todo lo anterior, la jubilación.

Este es el segundo artículo de la serie, en el cual comenzaré a desarrollar con mayor detalle el tema del fallecimiento, con la idea de generar reflexión sobre los aspectos que deberíamos de considerar para disfrutar, proteger y optimizar lo que día a día nos mueve a trabajar para lograr el bienestar propio y de nuestras familias.

El fallecimiento es un tema que en nuestra cultura es poco comentado entre las familias, y en algunos casos intencionalmente se evita porque se siente que lo podemos “invocar”, pero no hay nada más cierto que un día todos y cada uno de nosotros lo vamos a enfrentar, así que es mejor que pensemos que qué debemos de hacer en vida para que nuestros seres queridos y/o beneficiarios lo puedan enfrentar de mejor manera.

¿Has pensado qué pasaría si mañana no regresas a tu casa, qué situaciones enfrentaría tu familia directa (léase esposa, esposo, hijos, padres, amigos, o las personas con las que convivimos todos los días)? ¿A quién le tendrían que avisar, qué tendrían que hacer?

Son preguntas cuyas respuestas suenan caóticas, pero son situaciones a las seguramente ya nos hemos enfrentado de una o de otra manera y por lo difíciles que son, seguramente hemos comprobado que verdaderamente son situaciones poco fáciles de tratar. Entonces, a manera de razonamiento lógico cabe la pregunta, ¿si ya sabemos que va a pasar, por qué entonces no lo prevemos, nos preparamos mejor y si es posible dejamos menos problemas o incluso dejamos un legado y una plataforma que aligere la carga emocional y económica para nuestros seres queridos?

Sabías que en México alrededor del 60% de las personas mueren sin dejar un testamento, y te imaginas lo que esto implica? Muchos de nosotros sabemos que elaborar un testamento ante un notario no es cosa complicada, incluso podría decir que hasta es un proceso sencillo, y de hecho hay campañas como “el mes del testamento” que tienen descuentos en precios. Dejarlo hecho es realmente algo muy bueno para nuestra familia porque se van a evitar problemas que hasta en muchas ocasiones llegan a deshacer familias.

Hablando de seguros de vida, sabías que alrededor del 93% de la gente no cuenta con uno? Es importante considerarlo sobre todo como cabeza de familia, aunque no es limitativo a los demás miembros. Según estadísticas de ingreso y gasto, una familia tarda en promedio cinco años en recuperarse económicamente de la pérdida del titular o responsable. Así que a manera de ejemplo, si yo soy un jefe de familia que tengo ingresos por 50,000 pesos mensuales, necesitaría tener un ahorro o un seguro de vida de la misma cantidad, multiplicado por 60 meses (cinco años), que equivalen a tres millones de pesos para que mi familia busque compensar con otras fuentes de ingreso la pérdida económica en máximo ese mismo lapso.

Visto de otra manera, y siguiendo con nuestro ejemplo, cuando una familia cobra un seguro de vida de 3millones de pesos es muy probable que sienta que como es mucho dinero va a durar para toda la vida, que pueda gastar más, o vivir de los intereses, o emprender un negocio. La realidad es que habrá que cuidar muy bien esos recursos y comenzar a buscar fuentes alternas de ingresos entre todos los miembros con capacidad productiva.

Además del testamento y de tener un seguro de vida, es muy recomendable revisar la situación que guardan nuestras tarjetas de crédito, departamentales, créditos automotrices, hipotecarios, etc., porque en muchos casos incluyen cláusulas en las que se especifica que los montos quedan saldados en caso de fallecimiento, o incluso hasta llegan a tener seguros de vida adicionales contratados.

Todo lo anterior suena muy bien a manera de recomendación y es muy probable que muchos de nosotros ya lo hayamos hecho y estemos bien organizados con estos temas, pero, ¿nuestra familia lo sabe o lo conoce?, ¿sabe dónde se encuentran los documentos correspondientes?, ¿con quién acudir en caso de que suceda?, ¿dónde cobrarlo?, ¿qué tramites realizar?, etc.

Por el momento lo voy a dejar ahí para dar oportunidad a la reflexión individual, que es uno de los objetivos principales de mi contribución, y en el siguiente artículo voy a continuar con el tema del fallecimiento, incluyendo la perspectiva de los beneficios que pudiéramos tener como empleados en una empresa y de los correspondientes a la seguridad social.

Recuerden que “Un día…” será publicado los días lunes de manera quincenal.

 

*gl

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista.
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