El CCE propone seguir con nuevo aeropuerto en Texcoco

CIUDAD DE MÉXICO.

El Consejo Coordinador Empresarial y organismos que lo conforman concluyeron que la solución más viable, competitiva y de largo plazo para resolver la saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México es continuar con la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, informó Juan Pablo Castañón, presidente del CCE.

Luego de entregar a Javier Jiménez Espriú –próximo secretario de Comunicaciones y Transportes– el documento con su opinión respecto de las alternativas, Castañón dijo que se tomaron en cuenta estudios técnicos y económicos realizados por un grupo de 30 expertos, por lo que el escrito contiene 13 consideraciones y 6 recomendaciones.

Entre las recomendaciones, destaca: “Mantener la obra en donde se está realizando. La demanda futura y actual de pasajeros y carga, y la imposibilidad de utilizar Santa Lucía a capacidades más amplias, lleva a esta clara conclusión”.

Castañón agregó que están de acuerdo con la necesidad de hacer ajustes a los costos de los materiales para la nueva central aérea, siempre y cuando no quede comprometida la funcionalidad del aeropuerto y destacó que “no necesitamos un aeropuerto suntuoso, pero sí funcional, con capacidad suficiente para asegurar el desarrollo de la aviación los próximos 50 años”.

Detalló que también se recomienda buscar alternativas de financiamiento mediante la bursatilización de deuda y la concesión parcial o total del proyecto.

IMPACTO SOCIAL

En el documento se destaca la importancia de crear una “Zona Económica Especial de Alto Impacto Social” para beneficiar a los habitantes de esa zona.

“En esta región vive casi 30% de los habitantes del Estado de México; una de cada tres personas ocupadas percibe menos de dos salarios mínimos al mes; 28.9% de la población de 15 años o más tiene educación básica incompleta; en el 8% de los hogares donde hay niños, comen una sola vez al día; uno  de cada cuatro hogares no tiene lavadora y uno de cada nueve carece de refrigerador. En esas condiciones, el potencial de transformación del NAIM es una oportunidad que debemos considerar y no dejar pasar”, remarca el escrito.

RIESGOS

En el estudio se advierte que los costos financieros y de tiempo de suspender la obra actual serían muy altos en cualquier fase, además de que se retrasaría la solución a la saturación del AICM.

Además, cancelar la obra tendría implicaciones jurídicas y financieras con acreedores y contratistas, con pérdidas por 120 mil millones de pesos, pero especialmente riesgos “reputacionales en perjuicio de México y de futuros proyectos de gran envergadura”.

Recordó que organizaciones internacionales con mayor experiencia en el desarrollo de aeropuertos –MITRE, IATA y NACO– diseñaron el espacio aéreo para el proyecto del NAIM, lo cual permitirá mantener los más altos estándares de seguridad en el Valle de México, y advirtió que “para el proyecto de Santa Lucía se compromete la seguridad aérea debido a la interferencia en las rutas de aproximación y despegue”.

Indicó que Texcoco permitirá atender hasta 135 millones de pasajeros por año en los próximos 50 años y Santa Lucía y el AICM sólo tienen una capacidad máxima de 65 millones de pasajeros.

AMU