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JOHANNESBURGO, Sudáfrica. - La última ola de huelgas ilegales que se propagó por el sector minero de Sudáfrica terminó este jueves después de que los trabajadores aceptaron una oferta de Anglo American Platinum Ltd, el mayor productor mundial del metal precioso.
Los sectores de platino y oro de Sudáfrica han sido sacudidos por meses ante el a menudo accionar violento de los operarios, alentado por disparidades en los ingresos y una disputa por trabajadores entre sindicatos, aunque podría desatarse un nuevo conflicto por inminentes recortes laborales y conversaciones salariales el próximo año.
El malestar laboral ha inquietado a los inversionistas en la mayor economía del continente y ha cobrado la vida de más de 50 personas, incluyendo 34 muertos por impactos de bala de la policía en un incidente a mediados de agosto cerca de una mina operada por el productor de platino Lonmin Plc.
"Todos los trabajadores están volviendo a sus tareas", dijo Evans Ramokga, un líder de las paralizaciones en Amplats, una unidad del atribulado grupo minero global Anglo American Plc , que ha enfrentado obstáculos durante dos meses para lograr que más de 30,000 empleados vuelvan a sus operaciones en varias de sus minas en Sudáfrica.
La compañía ofreció una asignación mensual adicional de 600 rands (67.42 dólares) o un incremento salarial mensual de 400 rands, así como un pago extraordinario de 4,500 rands.
Amplats ha sostenido que las huelgas reducirían las ganancias anuales en más de 20% y que las tensiones en el sector se mantienen, mientras que 37 trabajadores se presentarían ante la corte el jueves tras ser arrestados por violencia durante las protestas cerca de una mina de cromo operada por Xstrata Plc.
Las juntas directivas y los políticos en Sudáfrica podrán respirar aliviados tras el fin del peor conflicto laboral desde fines de la era del Apartheid en 1994, pero las incertidumbres aún ensombrecen el panorama.
El dominante Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, que ha ofrecido alzas salariales por encima del nivel de inflación, pero contuvo el activismo, ha perdido el control de gran parte de las bases del sindicato, una fuente de preocupación para el gobernante Congreso Nacional Africano y los jefes corporativos.
Anglo American, que esta semana elevó el costo estimado de su proyecto de mineral de hierro Minas-Rio en Brasil y advirtió sobre menores ganancias en su unidad sudafricana Kumba, está examinando la viabilidad de las operaciones de Amplats en una revisión ampliamente esperada que alentaría el cierre de minas y recortes laborales, lo que podría avivar aún más las tensiones sociales.
