:quality(75)/media/dinero/images/2013/01/cigarg.jpg)
Al año un fumador promedio gasta alrededor de 4,800 pesos en cigarros, que no solo se traducen en un desperdicio de dinero, sino en un riesgo real para la salud, reveló la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Destacó que en el país hay 7.1 millones de adictos al tabaco y seis es el número de cigarros que consumen al día, lo que les representa un gasto mensual de 400 pesos.
Asimismo, de las 10 enfermedades tipificadas como las principales causantes de muerte en el mundo, seis están relacionadas al consumo de tabaco, sin contar los gastos que generan al país y que ascienden a alrededor de 45,000 millones de pesos.
De acuerdo con la reciente Encuesta Nacional de Adicciones (ENA) la prevalencia de fumadores en las ciudades es de 21.7%, es decir, unos 18 millones de personas, cifra que representa una reducción de 5.0% desde 2002, año en que las políticas antitabaco se fortalecieron.
En este sentido, en la Revista del Consumidor, la Profeco expuso que el consumo de cigarros per cápita registró un descenso, al pasar de nueve cigarros a seis en ese mismo periodo, y que el número de ex fumadores ha registrado un aumento de más de 50 por ciento.
Sin embargo, aclara, el consumo de tabaco ha aumentado en la población adolescente, ya que en 2002 existían 3.4 millones de jóvenes entre 12 y 17 años que lo consumían, mientras que en 2012 se registraron 7.1 millones.
Es decir que hoy uno de cada cuatro jóvenes entre 12 y 17 años fuma, y de ellos casi 10% ya presenta altos grados de adicción.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), "la industria tabacalera produce y promueve un producto que, tal como se ha demostrado científicamente, es adictivo, provoca enfermedades y muertes y da lugar a una variedad de males sociales, incluido el aumento de la pobreza".
La publicación refiere que de acuerdo con la Oficina Nacional para el Control del Tabaco de la Secretaría de Salud, 70% de las personas adictas a la nicotina pretende dejar de fumar pero no sabe cómo hacerlo y 95 por ciento de las personas que intentan dejar ese vicio de manera autónoma reincide en su consumo.
