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CELAYA, Gto. 1 de marzo.— El secretario de Desarrollo Agropecuario, Javier Usabiaga Arroyo, se dijo “muy preocupado” por el brote de influenza aviar en 16 granjas de Jalisco en una zona limítrofe con Guanajuato, ya que ello podría representar que no se logró erradicar completamente el virus en granjas de esa parte del país que se vieron afectadas el año pasado.
“Es muy preocupante porque eso nos demuestra que no fue una contaminación espontánea sino que fue una omisión en la erradicación en Jalisco; no se erradicó totalmente, entonces esto es muy peligroso”.
Aun así, dijo que este jueves se mantienen las mismas condiciones establecidas en el último reporte del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), el cual establece que hasta el momento se han sacrificado en Guanajuato un millón 241 mil 265 aves enfermas, de las cuales 519 mil son productoras de huevo para consumo de la población y 722 mil 265 son gallinas reproductoras de pollo de engorda para consumo de carne.
Respecto a los señalamientos de que en Guanajuato podría complicarse el brote de influenza aviar, el secretario de Desarrollo Agropecuario lo descartó categóricamente debido a que para ello se deben dar una serie de condiciones en las granjas avícolas que hasta el momento no hay visos de que ocurra.
“No es algo crítico, no hay catástrofe ni punto crítico, el punto crítico es cuando ya no lo puedes controlar porque no hay vacunas o cuando se tiene que volver a una vacunación total como se hacía anteriormente”.
Reiteró que hasta el momento se han aplicado 3.2 millones de vacunas en las granjas donde se dieron los primeros brotes en Guanajuato y en las zonas cercanas y aseguró que se contará siempre con las vacunas suficientes, pues México es de los pocos países que producen sus propias vacunas para atender este tipo de contingencias sanitarias.
Endurecen medidas por virus
Alrededor de la zona donde se encuentran ubicadas las 38 granjas con presencia del virus de influenza aviar en Guanajuato y Jalisco, existe un cerco sanitario de 25 mil kilómetros cuadrados que comprende las entidades de Querétaro, San Luis Potosí y Aguascalientes.
En el área trazada por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), existen 13 puntos de verificación instalados en las carreteras que conectan a la región del Bajío con el resto del territorio nacional.
En total fueron desplazados a los puntos de revisión: 30 inspectores federales, 30 auxiliares y 50 inspectores estatales que tienen como principal tarea evitar que entren o salgan del perímetro productos avícolas que no tengan un certificado que avale que están libres de la enfermedad.
Por lo que día, tarde y noche, personal del Senasica coordina los trabajos de supervisión, con el apoyo de elementos de la Policía Federal, Ejército Mexicano y policías locales.
“Hoy la intención es coordinarnos cada vez más y mejor para que el dispositivo de emergencia cumpla con su objetivo, que es la contención del brote de influenza aviar”, indicó Enrique Sánchez Cruz, director en jefe del Senasica.
Delito federal
Así, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) está inspeccionando 158 unidades de producción avícola –granjas– no solo en Guanajuato, sino ya también en Aguascalientes y los Altos de Jalisco, a fin de localizar brotes.
El encargado del despacho de la Delegación de la Sagarpa en Guanajuato, Silverio Rojas, manifestó que se han revisado granjas y predios de avicultura de traspatio en los municipios guanajuatenses de Dolores Hidalgo, San Miguel de Allende, Cortazar, Juventino Rosas y San Diego de la Unión, más 16 unidades en Encarnación de Díaz y Lagos de Moreno, en los Altos de Jalisco.
El funcionario federal advirtió que existen retenes y filtros en todas las carreteras de Guanajuato, así como en sus pasos a sus entidades vecinas, como Querétaro, San Luis Potosí y Jalisco.
“Los retenes son para todo tipo de aves, incluso de combate, y quien no permita que se le revise estaría cometiendo un delito federal”, dijo Rojas.
De esta forma, estableció el funcionario federal, ni huevo ni pollo de granjas de Guanajuato entra a otras entidades vecinas.
La Senasica exhortó a los productores a no bajar la guardia y fortalecer las medidas de bioseguridad, entre otras cosas, al extremar los cuidados en la movilización de productos avícolas.
Comentó que actualmente existe una buena disposición de las empresas afectadas (Bachoco, Pilgrim’s Pride y un avicultor independiente) para cumplir con las reglas establecidas por la alerta sanitaria.
Sacrificios
En un recorrido realizado por Excélsior, se observó que en plantas de Bachoco, ubicadas sobre la carretera que va de Dolores Hidalgo a San Miguel de Allende, Guanajuato, gallinas que murieron a consecuencia de la influenza aviar son quemadas y enterradas en el lugar para evitar que sigan siendo un foco de infección.
De hecho, desde un campo de cultivo vecino a la unidad de producción, es posible observar a personal que llena de cal a las gallinas que tuvieron que ser sacrificadas de manera “humanitaria”, de acuerdo a la Ley Federal de Sanidad Animal.
El método de eliminación de aves enfermas más utilizado en México es envolverlas en una lona de plástico, hasta formar una especie de cápsula, para después abrir un tanque de monóxido de carbono y lograr que mueran por asfixia.
Hasta ahora, el despoblamiento de las granjas en Guanajuato y Jalisco significa la muerte o sacrificio de tres millones 266 mil 714 aves.
Profeco cierra siete bodegas
La Procuraduría Federal del Consumidor informó que clausuró siete bodegas en la Central de Abasto de Toluca, Estado de México por alteraciones en los precios del pollo y huevo.
“Nos brincamos la multa y nos fuimos ya a la clausura por reincidencias a violaciones a la ley. En esto seré implacable, cuando haya reincidencia se ha procedido a la clausura de los expendios que tengan reincidencias en violaciones a la ley”, consideró.
El titular de la dependencia, Humberto Benítez Treviño, advirtió que las medidas que se han ejercido por los abusos serán implacables en contra de los comerciantes voraces, que de manera injustificada incrementen los precios del huevo y pollo con el pretexto de la influenza aviar.
La Profeco ha realizado mil 500 monitoreos de precios, adicional a las mil 910 visitas de verificación que han realizado en todo el país.
Informó que las sanciones económicas que se aplican por abusos y especulaciones en los precios de pollo y huevo van de 600 pesos a un millón 600 mil pesos.
