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CIUDAD DE MÉXICO.- El éxito de un escritor no se puede conseguir con una varita mágica. A pesar de que J. K. Rowling inventara todo un universo de hechicería, pociones y brujas, la autora de la saga de Harry Potter tuvo que enfrentar varios desafíos antes de lograr convertirse en una de las escritoras más cotizadas del siglo XXI.
La escritora originaria de Gloucestershire, Inglaterra, es una de las mujeres más ricas en el Reino Unido, cuya fortuna fue calculada en 2011 por alrededor de 1 billón de dólares, actualmente ocupa el lugar 82 del ranking de celebridades más influyentes de la lista de Forbes.
Quince años después de que saliera el primer libro de Harry Potter, en el 2012 la saga completa se comenzó vender en versión digital, por medio de la tienda virtual Pottermore.
Cabe destacar que Rowling es la única autora que ha conseguido un mayor ingreso por los derechos en la venta de los ejemplares en línea.
Además del gran negocio de llevar sus libros a la pantalla grande, la escritora también ha innovado al participar en la elaboración del libro de hechizos para Play Station 3, lanzado el año pasado, y este año con un nuevo videojuego llamado el Libro de Pociones, presentado el pasado mes de junio.
Pero el éxito de Rowling no se dio por arte de magia, ya que la escritora tuvo que recorrer un camino lleno de dificultades para lograr entrar a la industria editorial y mostrar su trabajo.
En múltiples entrevistas, incluso en su propio sitio oficial, Joanne ha contado cómo era su vida antes de que se publicaran sus libros, al vivir entre la depresión, sin dinero y tratando de sobrevivir con su hija recién nacida.
Rowling ha relatado en varias ocasiones que en 1994 inició con el proyecto de su primer libro pasando horas en cafeterías de Edinburgh, Scotland, mientras cuidaba a su hija, recien divorciada, viviendo de la pensión de desempleo.
Cuando Rowling terminó el manuscrito de Harry Potter y la Piedra Filosofal al inicio de 1996, fue rechazada por 12 editoriales antes de que Bloomsbury le ofreciera un adelanto de solo 1,500 libras para publicar su primer libro.
Sin embargo, hubo otras condiciones que tuvo que aceptar la creadora de uno de los hechiceros más famosos antes de que publicaran su propuesta literaria.
Los editores pidieron a Rowling que firmara con sus iniciales, ya que estaban preocupados de que los niños rechazaran la publicación al darse cuenta que había sido escrito por una mujer, por lo que tuvo que aceptar firmar como JK Rowling, agregando la 'K' que era la inicial el nombre de su abuela "Kathleen".
Esta no sería la única ocasión en que alguno de sus libros fuera rechazado, ya que este año Rowling volvió a sorprender a los lectores cuando se descubrió que ella era la autora de una novela negra llamada 'The Cuckoo's Calling', atribuida inicialmente a un policía militar retirado llamado Robert Galbraith, el cual resultó ser un pseudónimo de la escritora.
Antes de ser publicada, la novela de género policiaco había rechazada por la editorial británica Orion, ya que desconocían el origen real de la novela. Sin embargo esto evidencia una vez más el largo camino que necesita recorrer un escritor debutante.
Actualmente, Joanne Rowling se embarca en una nueva carrera con el lanzamiento de su último libro 'Una Vacante Imprevista' (The Casual Vacancy), dirigido al público adulto, el cual fue publicado en septiembre de 2012.
La novela ha vendido alrededor de 1.5 millones de copias en Estados Unidos.
Mientras tanto después de descubrirse que Rowling había escrito la novela policiaca "The Cuckoo's Calling", esta pasó de estar en el lugar 5,076, al top de ventas de la lista de órdenes de Amazon.com.uk.
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