Elabora un plan financiero para tu jubilación

CIUDAD DE MÉXICO.- La incertidumbre constante de los trabajadores que cuentan con una afore es que consideran que en cualquier momento el gobierno puede quedarse con ese dinero. Pese a los esfuerzos por impulsar la cultura del ahorro para el retiro una de las constantes barreras a las que se enfrentan las autoridades en la materia, Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro (Consar), es que la población desconfía del sistema.

De hecho, éste es uno de los principales argumentos que los cuentahabientes argumentan para negarse a realizar aportaciones voluntarias: “Para qué invertir si al final te quitan un porcentaje significativo de impuestos y no te lo dan completo”. “Para qué, si al final el gobierno buscará que haya una crisis y se quedará con él”, son de los más socorridos.

Lo que es una realidad es que el ahorro para el retiro debe iniciarse desde el momento que comienzas a trabajar, para que puedas tener una vida sin sobresaltos, tal vez no de lujos, pero sí mantengas el nivel previo a tu jubilación, ya sea a través de la afore u otras opciones.

Si eres de los que considera que realizar aportaciones voluntarias no es para ti, existe otra opción para que puedas construir un mejor futuro, no dependas de tus hijos o tengas que seguir trabajando porque no te alcanza, aún cuando ya estás jubilado.

Los Planes Personales de Retiro (PPR) son cuentas de inversión establecidas con el único fin de recibir y administrar recursos destinados para cuando el titular cumpla 65 años, incluso en casos de invalidez o incapacidad para realizar un trabajo de acuerdo con la ley de seguridad social.

La salud, nueva prioridad

Alan Gómez, director de Ventas Afore de Principal Group, aseguró que es importante considerar que la prioridad de los gastos cambia conforme a la edad. Por ejemplo, cuando se es joven se gasta más en diversión que en salud, pero cuando ya se es adulto mayor los gastos con respecto al cuidado de la salud se vuelven primordiales, incluso llegan a incrementarse.

De hecho, en hogares con adultos mayores se establecen medidas de cuidado de la salud, 2.5 por ciento de sus gastos mensuales, según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2012 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

A escalal mundial los problemas de salud más frecuentes en la población adulta mayor son las enfermedades crónicas, como las cardiopatías, cerebrovasculares y pulmonares.

Así, las enfermedades crónicas o no, generan un gasto mensual o trimestral significativo para el presupuesto de las personas retiradas, situación que se complica porque ya no cuentan con un sueldo mensual que pueda mitigar esos gastos recurrentes.

Alternativas

Todos envejecemos y enfermamos, y si no se ha elaborado un plan de ahorro eficiente pensado para enfrentar padecimientos de la tercera edad es momento de poner atención, aquí algunos consejos:

Siéntate con tu pareja y realiza los cálculos de cuánto tiempo te falta para retirarte y cuánto dinero necesitarás para vivir durante ese tiempo.
Toma en cuenta los costos de: vitaminas, medicinas, análisis, incluso de padecimientos como: presión arterial o diabetes, entre otros, que te permitan hacer un cálculo real aproximado. Multiplica el gasto por doce meses y el total por 15 años (tiempo aproximado de vida, después de tu retiro).
Un seguro de gastos médicos mayores para una persona de 65 años tiene un costo anual aproximado de cuarenta mil pesos (el costo puede variar de acuerdo a la entidad donde lo contrates), ahora multiplica este costo para tu pareja.
Una vez que tengas esos costos súmales tus gastos fijos como: comida, agua, luz, gas, renta o predial y añade un porcentaje más por concepto de diversión o entretenimiento.
Suma todos los rubros y tendrás el costo mensual de lo que tú y tu pareja requerirán de ahorros para vivir la etapa de su retiro.