Cinco pasos para combatir el miedo

Ciudad de México.- Combatir el miedo puede ser una idea titánica porque esta emoción es más que físicamente desagradable. El miedo puede impedirnos buscar concretar las cosas que realmente nos importan, como seguir nuestros sueños, por ejemplo.

Sin embargo siempre hay formas de combatirlo y continuar hacia adelante con lo que deseamos. Aquí te proponemos algunas ideas:

Básate en la experiencia.

Las cosas a las que temes nunca son tan malas en la realidad como te lo hace creer la mente.

¿Te has dado cuenta cómo después de una presentación descubres que todo marchó bien y que el público reaccionó favorablemente?

Así que busca la experiencia y esfuérzate por hacer las cosas que temes para desarrollar la confianza en ti mismo.

Conócete a ti mismo

Esta es una máxima y es importante practicarla en todo momento. Para liberarnos del miedo primero tenemos que enfrentarnos a lo que tememos de nuestro interior. Medita todos los días y analiza qué es de tu vida en los últimos momentos. ¿Cómo la estás conduciendo?, ¿hay algo que te provoque miedo?, ¿existe algo que bloquea tus sentimientos y tu confianza?, ¿últimamente te bloqueas? Pregúntate qué está pasando ahora en tu vida.

Después de conocerte serás capaz de hacer frente a lo que te asusta tanto en tu interior como en el exterior y podrás encontrar más coraje en ti para superar todos los obstáculos que se te presenten.

Pinta tu raya

Uno de los pasos más importantes para liberarte del miedo es crear un espacio entre tú y la circunstancia u objeto que te provoca temor. Eso no quiere decir que tengas que ignorar el hecho o evitarlo a toda costa, sino que reconozcas que ‘eso’ te provoca miedo y lo enfrentes. Sé consciente de lo que te hace temblar y afróntalo en ese mismo instante.

Controla tu respiración

Una vez que reconociste la presencia del miedo, el segundo paso es controlar la respiración de modo que ésta sea más lenta y suave. Así será más fácil para ti evitar no sólo los síntomas emocionales del temor, sino también los físicos y encontrarás que el espacio entre tú y la emoción que te atemoriza aumenta.

Visualiza un resultado positivo

Con la práctica, puedes reemplazar un pensamiento temeroso por uno positivo y así visualizar un buen resultado para lo que estarás a punto de hacer.

Por ejemplo, si vas a hablar delante de un grupo de personas, visualiza cómo ellas están siendo impactadas positivamente por lo que dices y cuántos beneficios puedes aportarles en vez de pensar que se reirán de ti, que todo saldrá mal o que lo que dirás no tiene mayor importancia.

Estos consejos los retomamos de Huffington Post para ti.

*livm