Legalización de mariguana en México desde la perspectiva económica

CIUDAD DE MÉXICO.- Regular, despenalizar y legalizar, de acuerdo con los especialistas que presentaron sus posturas respecto al uso de la mariguana en México, nuestro país debe comenzar la discusión sobre cómo abordar una nueva política pública en cuanto al trato de las sustancias, que hasta ahora, son ilegales en el territorio nacional.

 

Durante el segundo día del Foro Internacional de Política de Drogas organizado por la Cámara de Diputados, los especialistas consideraron que la política que impera en México y el mundo, respecto a las drogas, es una política de hace 40 años, que necesita ser revisada y cambiada.

 

 

 

En la mesa de “Regulación e Impacto Económico de las drogas en México”, el profesor Alejandro Madrazo Lajous, dijo que los costos han implicado que el gobierno se enfrente a una guerra que permita socavar los principios y derechos constitucionales.

 

Es decir, al declarar la guerra, los propios ciudadanos se han convertido en enemigos, y por ende, son despojados de sus derechos, aun cuando son mexicanos. Según Madrazo Lajous se identifican tres costos constitucionales: Restricción de derechos, Conflación de funciones y reconfiguración del gobierno.

 

Por su parte, Alejandro Hope, investigador y director de seguridad del Instituto Mexicano para la Competitividad, señaló que antes de legalizar, es importante medir y cuantificar el tamaño del mercado de las drogas. Al respecto, consideró que actualmente, en el país no se tienen cifras reales y actualizadas sobre el consumo, precios e ingresos del mercado de drogas.

 

Sin embargo, en México no se cuentan con las herramientas de medición que permitan saber el tamaño del mercado de la ilegalidad, puesto que no existe algún registro en el sector financiero. 

 

Además, otros instrumentos como la Encuesta Nacional de Adicciones son mediciones que no se realizan con la frecuencia necesaria para generar indicaciones útiles, por ejemplo, en los últimos 24 años, sólo se han hecho seis de estos estudios.

 

De acuerdo con Hope, los datos más recientes y posiblemente más confiables, son de este año y provienen de la Oficina de Control de Drogas de Estados Unidos. Por ejemplo, en los últimos 10 años el mercado de la mariguana ha crecido un 30%, mientras que el de la cocaína aumentó un 50 por ciento.

 

En el caso de Colorado, la demanda de mariguana es más grande de la que el gobierno imaginó, las ventas totales que se calculaban que para los habitantes locales serían de 121 toneladas, mientras que para los visitantes alcanzarían las nueve, lo que da un total de 130 toneladas.

 

Lo reportes del Colorado Department of Revenue, indican que las ventas en el mercado legal son de 77 toneladas, lo cual sugiere, que un poco más del 40% se mantiene en la ilegalidad, es decir, 53 toneladas.

 

Hope propone la creación de instrumentos de medición similares, los cuales incluyen, realizar una Encuesta Nacional de Adicciones una vez al año.

 

En su ponencia, Erick Antonio Ochoa de la Fundación Interamericana del Corazón, dijo que no existe un proyecto con objetivos claros para prevenir el consumo de drogas. 

 

De acuerdo con el Programa de Acción Específico sobre Adicciones del 2007 al 2012, se reconoce, que por cada peso que se destina a la prevención de adicciones, hay 16 pesos para el combate. Lo cual da como resultado un desequilibrio entre combate y las políticas de prevención.

 

Para poner en contexto, se mencionó el caso del alcohol, que es la principal droga legal, la cual, ha aumentado su consumo en los últimos años. En la Escuela Nacional de Adicciones (ENA), se indica que en el 2008 las personas con dependencia de alcohol era de 5.0%, mientras que para el 2011 el consumo dependiente pasó al 6.2 por ciento.

 

Con los datos de la misma encuesta, se encontró que las tendencias regionales de consumo de drogas ilegales, indican que en el norte se tiene la prevalencia más alta de consumo de cualquier droga (2.8%) y cualquier droga ilegal (2.3%).

 

Mientras que en el caso de la mariguana, en la población de 12 a 17 años, el consumo de esta droga ha aumentado significativamente en la región norte: 0.8% en 2002, pasó a 1.4% en 2008, y 2.2% en el 2011. 

 

En el panorama mundial, según cifras del Informe Mundial de Drogas 2013 de la ONU, el consumo de cocaína disminuyó en Estados Unidos; mientras que el cannabis, la sustancia ilícita más consumida en el mundo, registró un pequeño aumento de prevalencia (180.6 millones, es decir, 3.9% de la población de 15 a 64 años de edad).

 

Sin embargo, Erick Antonio Ochoa advirtió que ante la urgencia por legalizar el uso de la mariguana, se debe pensar en los casos de las drogas legales, las cuales se han convertido en industrias muy poderosas capaces de incidir en las agendas de regulación de los gobiernos. 

 

Por ello, antes de legalizar otra sustancia, recomendó explorar mecanismos y legislaciones alternativas que no permitan el crecimiento y empoderamiento de estas industrias.

 

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