Uber no teme a una regulación

CIUDAD DE MÉXICO.- La creación de plataformas tecnológicas y aplicaciones para hacer más eficiente la movilidad en las ciudades requiere que los gobiernos locales modifiquen o generen una nueva regulación que norme la competencia entre estos nuevos medios y los tradicionales que tenga como objetivo beneficiar al usuario, consideró Rodrigo Arévalo, gerente general para México de Uber.

“Las regulaciones de movilidad, en general en el mundo, no están preparadas para un modelo de negocio como Uber de eficiencia y tecnología porque se hicieron hace décadas cuando no existían ni los smartphones, ni internet y mucho menos las aplicaciones”, aseguró al platicar con Excélsior.

El modelo de negocio de esta aplicación, creada en San Francisco, California, y que ahora tiene presencia en más 150 ciudades del mundo, se basa en que cualquier persona que tenga un automóvil puede brindar un servicio de transporte.

Esto genera una competencia directa para el gremio de taxistas quienes deben pagar por una licencia para operar, comprar placas específicas, pasar revisiones y demás, por lo que en países europeos e incluso en Colombia han mostrado su rechazo y piden a las autoridades regular la entrada de Uber o evitarla.

Para Arévalo ello obedece a que los monopolios que han estado por décadas en el viejo continente están tratando de pelear la nueva competencia, aunque quien debe decidir es el usuario.

“Se está pensando en el consumidor por primera vez en más de 100 años y hay gente a la que no le gusta”, declaró.

Comentó que en México no han tenido problemas de este tipo y, para evitarlos, están dispuestos a trabajar con el gobierno para crear una regulación que le dé “un hogar permanente a Uber”, en particular tomando en cuenta que las autoridades del Distrito Federal están enfocadas a mejorar el transporte impulsando el ciclismo o con el Programa Hoy No Circula.

El gerente general agregó que el principal objetivo de la nueva regulación, si se llega a realizar, debe ser el beneficio del usuario para que pueda moverse mejor y más barato.

De hecho, una de las ideas de la empresa estadunidense es impulsar el uso compartido de automóviles con una versión llamada UberPool, que está en su fase beta en San Francisco.

En busca de la expansión en el suelo mexicano

Arévalo indicó que en el año de operaciones que llevan en México han tenido un buen recibimiento y por eso están dando el servicio actualmente en el Distrito Federal, Guadalajara y Tijuana, pero la meta es aumentar el número de ciudades en el país.

“En todas las ciudades grandes en México y que tengan algún problema de tráfico o transporte público vamos a estar antes del final de 2015”, se comprometió el ejecutivo.

Lo anterior porque ven una gran oportunidad de negocio al ayudar a resolver el problema de tránsito o seguridad por medio del teléfono.

En este sentido destacó que tienen un filtro de seguridad para sus conductores muy alto, ya no sólo hacen examen sicológico, médico, antidoping, de conocimiento de la ciudad y de políticas de servicio, sino que también pasan por una investigación criminal y de antecedentes de conducción.

La conectividad no es un problema

El gerente general de Uber para México aceptó que el número de población en el país que cuenta con un smartphone, acceso a internet móvil y tarjeta de crédito, todos ellos son elementos necesarios para contratar el servicio de Uber, es bajo, sin embargo confía en que esto cambiará en los siguientes años.

“Hace 15 años no todo mundo tenía celular y ahora no todo mundo tiene internet, va a llegar un punto en el que todos tendrán un plan de datos o de prepago, es cuestión de tiempo y es empujar las barreras de la tecnología y empujar esa penetración de internet”, confió.

A lo que añadió que otro punto que debe cambiar o actualizarse son los sistemas de pago porque varios bancos tienen problemas para aceptar pagos con tarjetas de débito en la compra de aplicaciones, de ahí que hasta el momento sea más fácil aceptar tarjetas de crédito, pese a que hay más de las otras.