Análisis superior

26 Mar, 2015

Problemas de lectura

Hay una gran cantidad de especulaciones en torno al cumplimiento o no de Grupo Radio Centro del pago que ofreció por una de las dos cadenas de televisión abierta digital que en su mayoría tienen más opiniones que fundamentos.

Es claro que no se conocen las bases de licitación que hizo el IFT y de ahí se parte hacia conclusiones totalmente equivocadas, muchas veces partiendo de comparaciones que no tienen sentido.

Primero. La diferencia de precio pagado por los dos grupos ganadores ciertamente es abismal, como también es la posición financiera de ambos. Lejos de verlo como un problema de la licitación, como señalaron algunos analistas y senadores, es una virtud.

Si las ofertas se hubieran establecido después de conocer el número de participantes (tres) hubieran sido mucho más apegadas al precio mínimo de referencia de 850 millones de pesos.

Sabiendo que sólo eran dos grupos por igual número de cadenas de televisión, los incentivos hubieran sido por ofertas mucho menores. La oferta más cercana al valor de referencia fue superior, a favor del Estado, en casi mil millones de pesos. Evidentemente Grupo Radio Centro no hubiera ofrecido más de dos mil millones de pesos sobre el valor de referencia.

Los senadores que en su momento no cuestionaron las bases de licitación ahora abogan por un esquema en el cual los ingresos del Estado hablen de la mayor competencia.

Olvidan o fingen hacerlo, que el valor económico sólo representó 40% de la decisión del IFT, es decir, pesaron más los criterios de cobertura y barra programática en los cuales se lograron dos ofertas que cubren a más de 90% del país.

También es bueno recordar que luego de un largo debate el IFT logró que la Secretaría de Hacienda disminuya a la mitad el precio de referencia que, es bueno recordar, lo fija la dependencia encabezada por Luis Videgaray no el instituto presidido por Gabriel Contreras.

Se equivocan quienes pretenden, ahora, que el pleno del IFT les hubiera dicho a empresarios que libremente decidieron entrar cuánto tenían que intervenir, lo que hubiera implicado también su plan de negocios.

Ha quienes ahora toman los números de Grupo Radio Centro y los comparan con su oferta: Eso sólo le corresponde a este grupo empresarial. Es un error verdaderamente grave suponer que el IFT debió haber rechazado la oferta por su monto.

La ley y las bases de licitación establecen precio mínimo, no máximo. Antes de abrir los sobres evidentemente el IFT no conocía la oferta y, por lo tanto, no puede prejuzgar sobre su cumplimiento. Ese es un tema de libertad empresarial en el cual ningún ente público debe intervenir para “modular” la visión empresarial.

Grupo Imagen Multimedia ha dejado claro que su oferta económica representa solamente 18% de la inversión total de arranque, puesto que no basta tener la concesión (que deberá ser entregada a principios de abril a más tardar) sino como transformarla en un negocio rentable para los accionistas y a favor de una competencia que sirva a los consumidores.

Incumplimiento

Segundo. El plazo fijado en la licitación es hasta el 10 de abril, es decir, hasta el momento no hay ningún incumplimiento; sin embargo, la comparación con Grupo Imagen Multimedia genera la impresión de retraso.

El viernes Grupo Imagen Multimedia pagó los  mil 808 millones que había comprometido, puesto que el plan de negocios de Olegario Vázquez Aldir tiene como principal característica la velocidad para poner a consideración de anunciantes y audiencias una oferta innovadora, valiente que busca tener una participación de algo así como 10% de la televisión abierta.

Han surgido versiones sobre la presunta participación o no de David Peñaloza como inversionista a través de Pinfra. El único hecho tangible es que esta empresa fue quien garantizó el cumplimiento del depósito de seriedad de 415 millones de pesos, que perderían si no cumplen con el pago en la fecha establecida.

No obstante también esto implica un problema bastante grave, puesto que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores debe realizar una investigación y, eventualmente, sancionar a Pinfra y Grupo Radio Centro porque jamás informaron al mercado como un evento relevante esta operación que sí impacta al mercado financiero, puesto que se tomó una decisión sin consultar a los tenedores de Certificados Bursátiles.

Grupo Radio Centro ha dicho que analiza diversas opciones de financiamiento nacional o extranjero para cumplir con este compromiso. Sin embargo, el tiempo corre en su contra, puesto que tiene que reunir autorizaciones no sólo del IFT sino también de la Comisión Federal de Competencia Económica y de otras instancias de la Secretaría de Hacienda, pues los socios requieren aprobaciones en muchos sentidos.

Así, que hay versiones en el sentido de que, incluso, habría solicitado financiamiento por parte de Nacional Financiera. El banco dirigido por Jacques Rogozinski a pesar de desarrollo no puede participar en operaciones que pudieran ser ruinosas para el capital del banco. El mandato del Presidente de la República es que no compitan con la banca comercial sino que trabajen de la mano con ella e intervengan en los sectores donde hay imperfecciones de mercado.

Ciertamente se han dado algunos acercamientos, pero no hay una solicitud de crédito y se duda mucho que sea presentada.

Hay quienes dicen que los socios de Grupo Radio Centro podrían generar que el IFT no supiera a quiénes les dio la concesión. Otra vez un incumplimiento a la verdad, puesto que cualquier inversionista que entre debe ser aprobado por el instituto tal y como está determinado en las normas.

Consecuencias

Tercero. Una pregunta que se hacen quienes no han leído las bases de la licitación es qué pasaría si Grupo Radio Centro no cumple con el pago. Esta empresa perdería el depósito de garantía.

Algunos equivocados dicen que la licitación se declararía desierta: nada más alejado de la verdad. Desde el punto de vista jurídico, la licitación se habría cumplido en todos sus términos y por lo tanto no se puede declarar desierta, ya que Grupo Imagen Multimedia está en proceso de recibir su título de concesión.

Las 123 estaciones regresarían al IFT que, con base en la ley y las bases de licitación, serían asignadas para generar grupos de carácter regional que, a su vez, pudieran integrarse como cadena, incluso con Televisión Azteca o Grupo Imagen Multimedia. Televisa no porque es preponderante en la TV abierta.

Hay quienes, un poco por protagonismo personal y otros pocos por mala fe, están aferrados en hacer creer que la licitación de la televisión abierta no funcionó o es un fracaso del IFT; sin embargo, hasta el momento se ha tratado de un proceso apegado a la ley que, en menos de un mes, ya permitió de entrada la creación de una tercera cadena de televisión abierta con los múltiples efectos positivos para la competencia, democracia y los usuarios de televisión abierta.