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CIUDAD DE MÉXICO.- El 5 de febrero de 2016 vencerá el plazo otorgado a México por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) para ocupar las posiciones orbitales 113.1 grados Oeste, que albergaría al satélite Centenario, y la 116 grados Oeste, que ocupará el Morelos 3, por lo que es necesaria una estrategia tanto para conservarlas como para contar con un respaldo del Morelos 3, dijo el astronauta mexicano José Hernández, integrante del equipo de la misión Centenario.
Tenemos dos posiciones satelitales que si no las utilizamos las perdemos. Ahora, ustedes dicen: oye pero nada más tienen un satélite, cómo le va a hacer. Ahí es donde entra la estrategia: podemos mover el satélite a una posición, operarla por 30 días, que son las reglas, y moverlo a otro lugar mientras llega el otro satélite”.
Entrevistado luego de participar en el Congreso Latinoamericano Satelital de Comunicaciones y Radiodifusión, el también asesor de la misión Morelos 3 dijo que su gran preocupación es que actualmente este satélite no tiene respaldo.
Recordó que cuando se contrató el lanzamiento del Centenario había sólo tres lanzadores, el Ariane, que rechazó participar en la licitación por considerar que era muy pesada y no podría cumplir; Sea Launch que estaba en quiebra, e Internacional Launch Services (ILS).
Jorge Juraidini, director de Telecomm, indicó que la situación económica del país no es un factor que esté en la mesa de preocupación del gobierno en cuanto a la estrategia de respaldo del Morelos 3 dado que se recuperará la inversión mediante los seguros y que existe la seguridad de que en el trabajo que se realizará con la Unión Internacional de Telecomunicaciones no se perderá órbita alguna.
Omar Charfen, coordinador de Organismos Descentralizados y responsable del Proyecto Mexsat, quien estuvo presente en el lanzamiento fallido del satélite Centenario hace una semana, Narró que, a los 8 minutos del despegue del lanzador Proton M, observaron en los monitores de las instalaciones que la agencia rusa les proporcionó, la pérdida de telemetría, es decir, de la comunicación del artefacto con la Tierra; que se comunicaron al centro de control y confirmaron que hubo un colapso, por lo que a más tardar a los 10 minutos del despegue él, personalmente, dio avisó directamente a Mónica Aspe, subsecretaria de comunicaciones de la SCT.
En mayo de 2007 México perdió la órbita satelital 109.8° Oeste, debido a que no hubo interesados en colocar un satélite antes del 5 de marzo de 2008.
En su momento PanAmSat ofreció migrar uno de sus satélites a esa posición en apoyo al gobierno para proteger la órbita. No se aceptó.
Las órbitas disponibles para el sistema Mexsat son las mismas que usa Eutelsat (antes Satmex) aunque en bandas diferentes. Ante fallas en los artefactos y la precaria situación financiera de Satmex estuvieron en riesgo.
