4 gráficas muestran todo lo que está mal con la jubilación en México

CIUDAD DE MÉXICO.- Si eres un trabajador en sus 20, 30 o 40 años, debes saber que la jubilación que vivirás será muy diferente a la que vivieron tus padres.

Actualmente tenemos un esquema de jubilación diferente en el que el hecho de tener una mejor pensión depende sobre todo del ahorro voluntario que aporte el trabajador, pero diversas circunstancias nos dibujan un panorama complicado.

Te explicamos con las siguientes gráficas dichas circunstancias:

1.- Tasa de Contribución

Aunque los trabajadores afiliados al ISSSTE aportan para su retiro arriba del 11% de su salario mensual, la mayoría de los trabajadores — afiliados al IMSS — aporta tan sólo el 6.5 por ciento. Una proporción insuficiente para alcanzar una pensión satisfactoria. La baja contribución resalta cuando se compara con la de otras naciones:

Gráfico: PFG México

2.-Tasa de reemplazo

Con una aportación por debajo de la de muchos países, la tasa de reemplazo (que representa el porcentaje del último sueldo de un trabajador con el que se retira) es de apenas el 30%, por debajo del promedio de los países miebros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que es de 54 por ciento:

Gráfico: PFG México

3.-Ganancias de las Afores

Aunque las Administradoras de Fondos para el Retiro (afores) han demostrado ser un buen instrumento de inversión para hacer crecer los ahorros de los trabajadores, con un rendimiento promedio anual real de 6%, los fondos especializados en invertir los recursos, son muy conservadores, un factor que limita las ganancias que se puedan obtener.

El régimen de inversión del Sistema del Ahorro para el Retiro es más conservador que otros esquemas similares en la región. México aún se enfoca en deuda gubernamental, que es más segura:

Gráfico:PFG México

4.-Seremos muchos jubilados que vivirán más años

En los siguientes 35 años, la población en edad de jubilación se triplicará y la población de jóvenes y niños disminuirá. La esperanza de vida aumentará y la tasa de mortandad disminuirá. Esto quiere decir que habrá más adultos mayores en edad de jubilación por personas en edad de trabajar, lo que someterá a los sistemas de pensión a una grave presión.

Mientras que en 1950 existían 13 adultos en edad de trabajar por cada adulto mayor, en 2050 habrá sólo 3 adultos en edad de trabajar por cada jubilado.