CIUDAD DE MÉXICO.-La Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) y el Sistema de Administración Tributaria (SAT) trabajarán en forma coordinada para combatir irregularidades en materia de comercio exterior, como la subvaluación, triangulación y uso indebido de regímenes aduaneros.
Lo anterior se informó luego de que tuvo lugar una reu-
nión inédita de trabajo que sostuvieron integrantes de la Canacero, encabezados por su presidente, Guillermo F. Vogel, y el Administrador General de Auditoría de Comercio Exterior del Sistema de Administración Tributaria.
En el encuentro se conformó un grupo de trabajo y coordinación para prevenir y detectar oportunamente fraudes y buscar condiciones justas en el comercio exterior.
Coordinados
Para ello se decidió la creación de un grupo de trabajo permanente entre gobierno e industria del acero, también se sentaron las bases para un próximo acuerdo de colaboración en materia de prácticas comerciales que incluya verificaciones de origen en el extranjero, análisis de las tendencias en las importaciones con cuota compensatoria y la posible instauración de medidas de control en el sector, informó la Canacero.
Tal acuerdo también permitirá emitir comunicados de prensa conjuntos para inhibir conductas fuera del marco legal, el esquema de control de fianzas a las importaciones temporales y la verificación de nuevas empresas de las industrias manufacturera, maquiladora y de servicios, de exportación, así como la homologación con leyes de Estados Unidos en la materia, además de la revisión de la operación del depósito fiscal y del recinto fiscalizado estratégico.
Nubes negras
La industria mexicana del hierro y el acero han exteriorizado su preocupación por la sobrecapacidad de acero que prevalece en el planeta, y que ha hecho caer los precios del producto. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estima que el exceso es de 700 millones de toneladas métricas; casi una tercera parte del tonelaje mundial.
Tal exceso de capacidad de producción ha llevado a que haya altos niveles de importación hacia las naciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) en los últimos años.
A medida que la demanda ha bajado en varias partes del mundo, particularmente en China, la región del TLC se mantiene como la única en donde el balance comercial del acero es negativo y es cada vez mayor. Se deben tomar medidas importantes para hacer frente al daño causado por estas importaciones, muchas de las cuales son objeto de dumping y/o subsidios.