Así afecta a tu salud vivir en una selva de concreto

CIUDAD DE MÉXICO.- Al parecer todas las ciudades lucirán iguales en un futuro, según indican diversos estudios. Bancos por aquí, oficinas por allá, cafeterías, torres, cadenas y demás pueblan cada centímetro de las urbes.

¿Cuál es el problema? La incesante construcción de edificios como estos en las ciudades puede dañar la economía local. Más aún, podría tener un costo emocional en las personas que se ven forzadas a vivir y pasar por ahí.

Una serie de investigaciones en ciencias cognitivas nos muestran lo que los paisajes citadinos podrían provocar en las mentes de las personas que interactúan con ellos.

Al parecer, las personas son más saludables cuando viven en entornos donde la variedad predomina o trabajan en sitios bien diseñados, atractivos y coloridos en lugar de “aburridos”.

Las personas funcionan mejor en entornos complejos y anhelan la variedad, no “grandes edificios, aburridos, en forma de caja", argumentan en su libro Cognitive Architecture: Designing for How We Respond to the Built Environment el profesor Justin Hollander y la arquitecta Ann Sussman.

Y esa no es una conclución nueva. En 2011 el neurocientífico Colin Ellard condujo un estudio en el que grupos de personas debían caminar en espacios citadinos. Los participantes contestaron algunos cuestionarios además de llevar sensores que medían la respuesta electrodérmica a ciertos estímulos.

Ellard encontró que las personas mostraban aburrimiento y en los cuestionarios, los participantes describieron los escenarios como “tristes”, “monótonos” y “sin vida”. En contraste, en entornos más amables a la vista, los sensores detectaron altos niveles de emoción física y utilizaron palabras como “llenos de vida”, “bulliciosos” y “sociables”.

Quizá el hecho de no apostar por los edificios “aburridos” pueda parecer simple capricho, pero estudios han demostrado que sentirse así puede generar estrés. Ahora imagina qué puede provocar vivir en un paisaje poco agradable a la vista.

Lo importante en el diseño urbano es producir algún tipo de cambio o novedad. De otra forma nos convertimos en personas cognitivamente no comprometidas”, dijo Ellard.

El truco, según los científicos, es diseñar espacios que provoquen emoción pero que no nos contaminen con demasiados adornos o información. No se trata de que todas las ciudades luzcan como Las Vegas o Times Square.

*livm