Lo bueno y lo malo de las listas de pros y contras para que tomes una decisión

Management - 31 Mar, 2017
Para decisiones críticas, una lista de pros y contras es útil solo como ayuda preliminar para pensar. Foto: Getty

La lista de pros y contras disfruta de una larga y comentada trayectoria que por lo menos se remonta a 1772, cuando Benjamín Franklin aconsejó a su amigo y colega científico Joseph Priestley que “dividiera media hoja de papel en dos columnas con una línea, escribiendo sobre una Pro, y sobre la otra Contra”.

 ¿Pero realmente qué tan útil es una lista de pros y contras?

Los pros

  • Rigor. Pensar detenidamente todos los pros y contras de un determinado curso de acción, y después capturarlos por escrito, minimiza la probabilidad de pasar por alto factores críticos.
  • Distancia emocional. Las decisiones importantes tienen probabilidad de evocar emociones poderosas. Crear una lista de pros y contras puede provocar lo que los investigadores Ozlem Ayduk y Ethan Kross llaman “perspectiva de distancia propia”, donde la decisión es vista como un problema “externo” a ser resuelto, aliviando el impacto de las emociones que lo rodean.
  • Familiaridad y simplicidad. Hacer una lista de pros y contras no requiere ninguna experiencia computacional o analítica y es elegantemente simple para administrar.

Los contras 

  • Los sesgos cognitivos son patrones comunes de pensamiento que llevan a errores de juicio y a mala toma de decisiones. La misma simplicidad que vuelve tan tentadora una lista de pros y contras crea muchas oportunidades para que emerja un número de sesgos cognitivos, incluyendo:
  • El efecto de enmarcar. Las listas de pros y contras generalmente tienen que ver con evaluar dos alternativas. Escenarios como estos de aprobar o desaprobar algo son ejemplos de “enmarcación estrecha”, un sesgo creado por limitar demasiado el conjunto de resultados posibles.
  • Exceso de confianza. Un sesgo cognitivo es la tendencia de las personas a sobreestimar la confiabilidad de sus juicios. Es probable que muchas personas asuman un nivel de certeza en sus evaluaciones de los pros y las contras que simplemente no existe.
  • Ilusión del control. Un sesgo común es creer que se puede controlar resultados que en realidad son incontrolables.
  • Dependencia en el pensamiento analítico. En un estudio, la “ausencia de deliberación atenta”, también conocida como “seguir los instintos”, condujo a mejores resultados que los derivados del uso de herramientas analíticas.

El veredicto

Para decisiones críticas, una lista de pros y contras es útil solo como ayuda preliminar para pensar.

(Chris Charyk es un asesor ejecutivo de The Boda Group).

kgb