Flaquea el sector automotriz en 2019

CIUDAD DE MÉXICO.- En anteriores oportunidades hemos apuntalado sobre la tendencia en el mediano plazo de la desaceleración de variables con potencial económico de arrastre. La conclusión del cuarto trimestre de 2018 nos ha dejado a la expectativa en diversos sectores, mostrando una extensión en el debilitamiento general. De nueva cuenta, los datos expuestos por la autoridad en materia estadística, el Inegi, muestran una perspectiva poco favorable en el sector automotriz, el sector más importante en lo que respecta a los subcomponentes de exportación en el país.

De los primeros reportes antes de cerrar el primer trimestre del año actual, por prelación, corresponde enfatizar en la dinámica del sector automotriz, ya que los últimos datos sobre ventas de vehículos ligeros muestran una inflexión negativa con respecto al mismo periodo del año anterior. Tenemos pues, una baja correspondiente a 5.5 % en febrero, dando continuidad a la tendencia negativa vislumbrada en el último mes del año pasado, con una caída de 10.77%, en una comparativa anualizada.

Otra variable de peso, expuesta con antelación en este espacio, es la aminoración del crédito en diversos sectores económicos, entre ellos el automotriz, dada la importancia del consumo en las posibles vicisitudes que tenga el PIB. Podemos destacar que la reducción en la canalización del crédito en diversos sectores, aunado a la falta de competitividad del sector bancario; lo cual, no le permite permear en el consumo interno. Haciendo énfasis en su papel como integrador de nuestro país en el mercado global de componentes, las cifras de exportación tampoco muestran un escenario alentador en el mediano plazo, con una desaceleración registrada de 0.06% en febrero de este año, vista de manera anual.

Para desentrañar la red de cadenas de consumo, que se enmaraña en una serie de transacciones intermedias de productos agregados de diversas formas en el mercado hasta llegar al consumidor final, el sector automotriz nuevamente ofrece resquicios de cómo se encuentra el estado del consumo en la economía mexicana. La producción muestra una dinámica adversa, impactando no sólo en el rubro de exportación, sino a su vez, en la integración al comercio alrededor del orbe. El desenvolvimiento en este segmento acumula caídas secuenciales, con una exacerbación de la tendencia en el año en curso, con una tasa de -5.03 % en el último periodo revisado.

Los datos expuestos por la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, en un contexto de ajuste calificativo sobre nuestro país, no dan buenas noticias de recuperación de la recesión experimentada por el sector, la que ya suma un prolongado periodo, sopesando el balance económico completo. Los riesgos en diversos aspectos se acumulan y todo parece indicar que el dato del PIB en el primer trimestre del año permanecerá cerca de la neutralidad en el crecimiento, aunado a las variables políticas que han tenido al mercado financiero en un estado de perenne cautela. En el aspecto macroeconómico, la economía global también muestra indicios de estancamiento, inclusive presentándose un escenario de posible recesión.

IMPORTANCIA

Cabe mencionar, con respecto a la capacidad de dinamizar el crecimiento y el desarrollo económico en el país, el sector automotriz muestra una destacada participación, debido a que aproximadamente representa el 3% en la contribución al PIB del país. Particularmente, este sector contribuye a la totalidad de las actividades secundarias en un 18.3%. Con un marcado crecimiento que supera a la totalidad de la economía, según las últimas cifras comparativas, mostrando un crecimiento cercano a cinco veces el crecimiento del PIB total, representando un 9.4% anualizado.

Las empresas en el sector generan un importante atractivo en la inversión extranjera directa, aportando como sector un porcentaje de peso del 12% en dicho rubro, en el periodo comprendido ente 2000-2017. En la misma línea, dicho sector representa no sólo una aportación de peso, sino también es el principal receptor de la inversión extranjera, superando al sector bancario y al minero, teniendo un peso equiparable a la totalidad del comercio al por menor, inmobiliario y sector en telecomunicaciones, en el presente rubro.

En una perspectiva histórica México se ha convertido en una plataforma dinámica en la producción y exportación de vehículos, lo cual muestra una evolución en el mercado de vehículos ligeros, dependiendo en gran medida del sector externo, o más específicamente de su principal receptor, que es Estados Unidos.

Dos aspectos a los cuales hay que poner atención en la dinámica automotriz son: la importación de componentes, la cual se ha ido desacelerando; y con respecto al financiamiento, la falta de incentivos del crédito al sector empresarial. Siendo importante en el comportamiento actual del sector.

Una de las principales conclusiones que podemos evaluar en este aspecto es que la focalización en el mercado de EU ha hecho menguar las cifras en el sector, debido a que en dicho mercado objetivo los riesgos se han acumulado de manera importante. La guerra comercial con China ha incrementado el déficit comercial estadunidense, debido a una política que mengua las bases del libre comercio.

Pese a que nos encontramos indexados al mercado más grande del mundo, lo cual, a grosso modo presenta un aspecto positivo importante, deja a México en un vaivén de fuerzas que se encuentran debatiéndose en esta transición hegemónica que podría favorecer a cualquier bando.

RETOS

En una coyuntura en la cual la economía mexicana se debilita, con un trimestre que vislumbra un enfilamiento hacia una disminución en las tasas de crecimiento, y con una revisión en las expectativas de crecimiento de diversas instituciones, entre ellas el mismo Banco de México.

Empero, todavía queda un amplio margen de acción, en el cual, la importancia entre la cohesión del sector público y el privado puede soslayar las tendencias mostradas en el último periodo económico, alcanzando la sostenibilidad en la tasa de crecimiento del PIB, cerrando el año tendiente a los dos puntos porcentuales.

No obstante, mientras las muestras de desaceleración continúen presentándose en las variables económicas de peso, nos encontramos en un contexto nada favorable con los objetivos planteados en materia de crecimiento. El mercado doméstico tiene que absorber de manera eficiente los riesgos fortaleciendo su competitividad y paulatinamente mejorando sus condiciones de diversificación, vislumbrando como objetivo principal el primer aspecto; y el caso del segundo como un efecto de este último.

La economía mexicana ha avanzado en aspectos que lo catalogan como un actor relevante en materia de manufactura global, y su alto nivel de integración en sectores como el automotriz, lo hacen partícipe de las disputas por el mercado; aunado a su posición geográfica estratégica que lo catapultan como un foco de inversión proveniente de diversas latitudes.

Sin embargo, ningún país puede socavar por cuenta propia la tendencia en el ciclo económico general, lo cual deja a México a expensas del desenvolvimiento de variables económicas de peso, tanto locales como globales. De estas variables estaremos al tanto sobre sus matices, las cuales conjugan los riesgos, ya cuando nos estamos acercando al cierre del primer trimestre del presente año.

* Por Jahavé Rubio y Miguel León, analistas de llamadinero.com