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En internet es común encontrar sitios que se dedican a la reventa de boletos para conciertos, festivales o eventos, sin embargo, aquí te decimos por qué no debes comprar boletos en sitios de reventa.
La compra de boletos en sitios de reventa no es una práctica nueva, no obstante, en los últimos años ha tenido mayor relevancia debido a que en comercializadoras oficiales, como Ticketmaster, se agotan rápidamente.
Quienes no alcanzan boletos en las comercializadoras recurren a los sitios de reventa para comprarlos, pero este tipo de páginas no ofrecen ninguna garantía, calidad o seguridad para los usuarios, según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
En la edición de enero de 2023 de la Revista del Consumidor de la Profeco se indica que existen diversos sitios o plataformas que han obtenido mayor alcance entre los usuarios de eventos masivos.
De acuerdo con la Revista del Consumidor, los sitios dedicados a la reventa de boletos más importantes son los siguientes:
Foto: iStock
La Profeco señala que Viagogo tiene presencia en más de 60 países, ya que ofrece boletos para eventos como la Fórmula 1, conciertos, espectáculos, festivales, obras de teatro, peleas de box y partidos de fútbol.
Sin embargo, la Profeco señala que en los términos y condiciones de Viagogo se especifica que no tiene ningún control ni garantiza la existencia, la calidad, la seguridad o la legalidad de las entradas, la veracidad o la exactitud del contenido o los listado de los usuarios.
Tampoco garantiza la capacidad de los vendedores para vender entradas o de los compradores para pagarlos o asegurar que un comprobante o vendedor completen una transacción.
Otra razón por la que no debes comprar boletos en reventa son los elevados precios de las transacciones, así como las comisiones que cobra la plataforma.
Finalmente, la Profeco recomienda evitar comprar boletos en reventa, pues en caso de un incumplimiento y en caso de querer presentar una queja , no será posible citar al proveedor debido a que operan fuera del país.
Con información de la Revista del Consumidor.
