Rusia incluye al movimiento LGBT como un grupo extremista y terrorista

Rusia ha clasificado recientemente al movimiento LGBT internacional como una entidad extremista y terrorista, según informaron fuentes de medios este viernes 22 de marzo.

Este paso sigue a una decisión previa de la Corte Suprema del país, que en noviembre había emitido un veredicto por el cual los activistas LGBT deberían ser considerados extremistas, provocando preocupación entre la comunidad homosexual y transgénero por posibles arrestos y procesamientos.

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Incremento de restricciones bajo la administración de Putin

En el marco de una orientación hacia valores tradicionales familiares promovida por el presidente Vladimir Putin, que se contrapone a lo que él denomina como actitudes decadentes occidentales, Rusia ha intensificado las restricciones relacionadas con la orientación sexual y la identidad de género durante la última década.

Entre las medidas adoptadas, se encuentra la prohibición de la promoción de relaciones sexuales consideradas "no tradicionales" y la negación de cambios de género, ya sean legales o médicos.

Estas acciones reflejan un endurecimiento de la postura del gobierno ruso contra las expresiones de diversidad sexual y de género.

"Hay pánico en la comunidad": el Tribunal Supremo de Rusia prohíbe el movimiento LGBT y lo declara como "una organización extremista" pic.twitter.com/UXyEMdpITT

— SÚPER STEREO MILED (@noticiasmiled) March 22, 2024

Medidas concretas y consecuencias

La entidad encargada de mantener la lista de organizaciones extremistas y terroristas, Rosfinmonitoring, ahora incluye en su registro al "movimiento social LGBT internacional y sus unidades estructurales".

Este organismo tiene la facultad de congelar las cuentas bancarias de individuos y entidades designadas bajo esta categoría, la cual abarca desde grupos conocidos como Al Qaeda hasta empresas tecnológicas de renombre y asociados de figuras de oposición dentro de Rusia.

Un caso reciente ilustra las consecuencias prácticas de estas designaciones: dos empleados de un bar fueron puestos bajo custodia policial, acusados de participar activamente en una “organización extremista” bajo la legislación que criminaliza a la comunidad LGBTQ+.

Este incidente marca la primera vez que se lleva a cabo un proceso penal de este tipo en el país desde la prohibición del “movimiento internacional LGBT” en noviembre, enfrentando los acusados la posibilidad de una pena de hasta diez años de prisión.

Expansión de la legislación y repercusiones

La acción contra el movimiento LGBT internacional se enmarca en una serie de medidas que han incrementado la represión contra la comunidad LGBTQ+ en Rusia.

En diciembre de 2022, una expansión de la ley de 2013 criminalizó cualquier expresión positiva sobre personas o relaciones LGBTQ+ en público.

Además, desde julio del año pasado, se prohibieron las intervenciones médicas y los procedimientos administrativos destinados a facilitar el cambio de género.