CEEG se energiza

Interesante fue la selección del presidente de Shell México, Alberto de la Fuente, como presidente del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales para el periodo 2021-2021, en sustitución de Claudia Jañez, quien se ha convertido en una de las ejecutivas más buscadas en los consejos corporativos del Top 100 en México.

Toma posesión en una coyuntura complicada para las empresas internacionales de energía en México, tanto en el sector de hidrocarburos (él dejó antes de la pandemia la AMEXHI, como en el subsector de energías renovables, no sólo por la elevada litigiosidad, sino por la difícil interlocución que tienen las empresas globales con Pemex, CFE, Sener y no se diga los reguladores del sector.

Resultó también interesante el discurso de, Tatiana Clouthier, titular de la Sener, pues sin preámbulos, ratificó su disposición a ser interlocutora del sector empresarial con las diferentes instancias del gobierno, pero siendo honesta, porque dijo que no siempre se podrán solucionar los temas en el sentido que pretenden.

El CEEG, dirigido por Erika Quevedo, tiene muchos temas críticos sobre la mesa, siendo seguridad y violencia, legalidad y Estado de derecho, solución de la crisis sanitaria, regulación y legislativo, logística, costos regulatorios entre los relevantes. Pero, seguro el impuesto corporativo a multinacionales y digitales será central en la discusión que iniciará en septiembre en México y que corre tinta en el G20 para tener la regla global en octubre. Se lo comento porque la integración del Comité Ejecutivo es una muy buena expresión de ese crisol de intereses y sectores del CEEG: Mónica Aspe, de AT&T; Angélica Ruiz, de British Petroleum; Paco Garza, de General Motors; Manuel Macedo, de Honeywell; Mónica Flores, de Manpower; Fausto Costa, de Nestlé; Paula Santilli, de PepsiCo; Alberto de la Fuente, de Shell, y Luz Adriana Ramírez, de VISA, quien, por cierto, sonó mucho para ser presidenta pero fue electa Tesorera.

 DE FONDOS A FONDO

#Pedro_Lichtinger… presidente y de Starton Therapeutics, ha pasado al siguiente nivel en su proceso de levantamiento de capital como Startup, pero va que vuela para convertirse en un Unicorn. Hasta el momento ha logrado convencer a unos 250 inversionistas individuales de México, latinos, europeos y de Canadá de su propuesta, lo que le permitió levantar 27 millones de dólares, para realizar cambios terapéuticos con medicamentos para el cáncer aprobados por la FDA, que han mostrado reducir 80% el tamaño de los tumores que, con terapias normales, aumentan en 3 veces. Tienen más de 5 pruebas clínicas en proceso de investigación y, están en periodo de levantamiento de 20 millones de dólares para continuar las fases 1 y 2, en las pruebas autorizadas por la FDA, además de tener toda la protección intelectual en EU y Protocolo Madrid.

Hace unos días, Lichtinger se presentó en Unicorn Hunters a través de un grupo selecto de expertos (que busca las mejores empresas emergentes cuya valoración puede alcanzar los mil millones de dólares de “unicornio”.

El círculo lo integran Steve Wozniak (cofundador de Apple), Alex Konanykhin (director ejecutivo de TransparentBusiness), Lance Bass (cantante, actor, productor e inversor), Rosa Gumataotao Ríos (extesorera de EU), Moe Vela (abogado, autor, emprendedor y exdirector de administración de Joe Biden), además de Silvina Moschini (cofundadora y presidenta de TransparentBusiness), entre otros.

Tres de ellos ya invirtieron, y otros tres se metieron al análisis del caso, pues según Lichtinger, la empresa hoy vale 250 millones de dólares y, en 15 meses podría estar realizando su IPO en Nasdaq con valor estimado de 650 millones de dólares, además de alcanzar, una vez terminada la segunda fase y obtenido el permiso de avance significativo de la FDA más de mil millones de dólares en 3 años.

¿Interesante?... Sí, considerando que Lichtinger tiene una trayectoria impresionante en investigación médica y terapéutica en tratamientos contra el cáncer en varias Big Pharma. Es como dicen una joyita de bajo riesgo, rápido acceso al mercado, alta rentabilidad y, un individual puede entrar con 3 mil dólares. Para mí, es mejor apuesta que una cripto.