“Imposición” y no “incentivo” en AIFA: ¿ocurrencia?

La decisión tomada por el presidente López Obrador de destruir el aeropuerto de Texcoco y construir y operar uno en Santa Lucía, el AIFA, no tendría tantos “asegunes” que se le achacan si la aviación civil mexicana tuviera categoría 1 en materia de seguridad aeronáutica por la OACI-FAA y, sobre todo, si el conflicto intrasindical y entre la administración 4T y el sindicato de controladores aéreos hubiera fluido adecuadamente y no con los problemas mediáticos y reales que afectan la operación de la aviación civil del espacio aéreo del Valle de México, incluido el AIFA.

Es tal, que no hay capitán de la industria que no se muestre “harto” de la política de “imposición” más que de “incentivo” que han adoptado de manera colegiada, el actual director general del AICM, Carlos Morán, y el titular de la AFAC, el piloto militar en retiro Carlos Rodríguez. En mayo se cumple un año de la degradación de categoría y nadie estima que se resolverá antes de junio.

Sume que pronto dejará su cargo como director del Seneam Víctor Hernández para ceder la plaza a Alan Luna Alatorre, otro piloto militar que se dice experto en seguridad aérea y que tuvo por mérito defender la destrucción de Texcoco argumentando que los pájaros eran el principal peligro para la seguridad de esa terminal.

El equipo de FAA vino hace dos semanas, estuvo con la AFAC, pero se fue sin noticias claras, pero comentando en off the record que “no hay avance” y, aunque nadie quiere decirlo para no herir la sensibilidad política de Ya Sabe Quién, la FAA tiene claro el registro de cómo la degradación ha permitido a las aerolíneas estadunidenses comerse el mercado transfronterizo sin que las mexicanas puedan responder.

Santa Lucía no puede tener vuelos de Norteamérica estando en CAT 2, por eso el anuncio de un vuelo venezolano. ¡Así se la gastan!

Es sonado el tema del incremento en los precios de los boletos de avión, pero en realidad, AICM y Hacienda subieron el TUA para seguir financiando el Tren Maya y construir el AIFA, y de pilón las aerolíneas no tienen subsidio de IEPS en la turbosina, la última de sus calamidades con aumento de 120 por ciento de septiembre a la fecha. Además, ni la AFAC ni el Seneam tienen personal suficiente o los equipos exigidos en el mundo para garantizar  la seguridad aérea.

Finalmente, el análisis realizado por las aerolíneas comerciales sobre los estándares de seguridad de AIFA indica que cumple en condiciones de aeronavegabilidad óptimas, no si hay viento, lluvia, ráfagas, neblina y aproximaciones fallidas o cuando haya horas de saturación en AICM. Por eso se multiplican voces que anticipan que se estresará el sistema, porque el Seneam tiene insuficiencia de personal técnico y equipo, y porque la operación de los dos aeropuertos no resolvió los cuellos de botella de tierra para operar dos aeropuertos en forma simultánea.

 DE FONDOS A FONDO

#KUO… Una muestra de reactivación económica será la primera edición de México Plastimagen 2022, la primera edición presencial de la industria del plástico en América Latina, con más de 400 expositores representando 1,000 marcas provenientes de más de 20 países en 13 pabellones internacionales.

En este sentido, déjeme comentarle que uno de esos expositores con mayor atención es Grupo KUO, dirigido por Alejandro de la Barreda, productor líder de poliestireno en México, que, a través de su marca Resirene, con una capacidad de producción anual de más de 170 mil toneladas y presencia en más de 20 países por el portafolio, ofrece en material plástico, poliestirenos reciclados y poliestireno de alto impacto con contenido de UBQ, este último, un material sustentable y circular hecho a partir de desechos domésticos.

Biorene, otro de sus productos es fabricado a partir de almidón para fabricar cubiertos, popotes, bolsas, empaques y envases de alimentos listos para consumir y/o para llevar, producto que cumple con la normatividad vigente en la Ciudad de México, respecto a las bolsas y productos plásticos de un solo uso y emisiones de CO2 en su producción.