Industrias esenciales a revisión por Trump y AMLO

Estar en los zapatos del subsecretario Hugo López-Gatell no es algo fácil, pues pareciera que toda decisión, inclusive diplomática, económica, migratoria, financiera, económica, están subordinadas a la lupa de López-Gatell. No creo que un humano pueda con tanto, en una crisis como ésta, aunque él pueda creerlo.

Le comenté lo indispensable que resulta una clara definición sobre qué industrias se consideran esenciales y cuáles no, pues en los recientes decretos del Consejo General de Salubridad, se excluye a industrias que son clave en la cadena de suministro global y es muy probable que el mismo presidente López Obrador se vea obligado a pedirle a su “jefe de técnico” en salud pandémica que reconsidere esas industrias. Seguramente el presidente Trump, en estas dos últimas conversaciones telefónicas, le habrá solicitado el tema, pues si Texas se prepara para abrir la actividad económica la semana que comienza y lo mismo hace California, esos estados, y muchos más, requerirán que se homologuen los 16 sectores esenciales dentro de la emergencia a los establecidos por el Departamento de Seguridad Nacional de EU.

Manufacturas críticas son las cadenas de suministros del sector transporte, del sector energía, del sector comunicaciones, de las tecnologías de la información, del sector agrícola y alimentario, las manufacturas químicas —también fundamentales son las instalaciones nucleares— y las de minerales industriales y semiconductores.

La secretaria de Economía, Graciela Márquez, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, la del Trabajo, Luisa María Alcalde, la Oficina de la Presidencia, de Alfonso Romo, han llevado este asunto a la mesa presidencial, pues la falta de definiciones desde el Consejo General de Salud para el sector de manufacturas críticas en México, afectará la correcta operación del resto de las actividades esenciales que dependen, en gran medida, de estas manufacturas para obtener insumos.

El pasado 15 de abril, un día antes de la segunda llamada entre el presidente López Obrador y el presidente Trump, en la que el primero se comprometió a ir adelante con el proceso de notificación del T-MEC para que se pueda firmar el primero de julio de este año, Jay Timmons, de The National Association of Manufacturers (NAM), le envió al presidente de México una carta en la que le da cuenta del grave perjuicio que implican estas indefiniciones.

NAM, que es una especie de Concamin de México, comenta en la misiva que se ha reunido con la embajadora Martha Bárcena, y con los representantes de la Sedeco en DC, para explicar la problemática desde mediados de marzo, pero a la fecha no hay respuesta, por lo que “urgen a México que reconozca con criterio de reciprocidad la guía emitida por CISA en estados Unidos, como base y con toda la extensión posible para reconocer y determinar cuáles son las industrias manufactureras críticas y esenciales, dado que eso permitirá que los fabricantes de ese tipo de industria en México reanuden operaciones con los criterios de protección a la salud que establezcan las autoridades y se asegure el mínimo de afectación a las cadenas de suministro en Norteamérica, más ahora que entrará en vigor el T-MEC”.

Así de claro es. Le comento que se han tenido reuniones con el sector privado de Estados Unidos y de México, y en Economía tienen detectadas las posibles disrupciones a diversas cadenas de suministro de Norteamérica. derivado de diferencias en la definición de sectores esenciales entre México y Estados Unidos, la mayoría asociadas a la industria automotriz, autotransporte, manufactura de componentes de diversos sectores esenciales, defensa, energía y electrónicos, pero también incluye la de suministros médicos.

DE FONDOS A FONDO

#Bioetanol… Uno de los contratos más complicados de entender en Pemex, que dirige Octavio Romero Oropeza, es el que se ha suscrito con Liondell Basell, el corporativo que dirige Bhavesh Patel, pues en México no se ha modificado la NOM de combustibles 016 en la CRE, porque Pemex lo impide, ya que tiene atado un contrato de suministro de MTBE que impide utilizar etanol al 10% en todo el país. ¡Lo raro es que ya vencía y lo renovaron!