Alicia Salgado

Cuenta corriente

Alicia Salgado

29 Ene, 2020

Salud: ¿liberación global de medicamentos?

Si pensaban que habían conocido todo, ayer en la industria farmacéutica se quedaron estupefactos. El secretario de Salud, Jorge Alcocer, publicó un acuerdo por el que se reconocen como equivalentes los requisitos establecidos en el Reglamento de Insumos para la Salud y los procedimientos de evaluación para la salud realizados por la Cofepris, de todos los medicamentos importados que tengan o no registro en México, pero que lo haya expedido la agencia suiza Swissmed, Comisión Europea, FDA de EU, Ministerio de Salud de Canadá, la APT de Australia o las agencias reguladoras de referencia OPS/OMS, precalificados por el programa de precalificación para medicamentos y vacunas de la OMS o agencias reguladoras miembros del esquema de cooperación de inspección farmacéutica, tendrán el registro sin pasar por el proceso de certificación en México para comprobar su calidad, eficacia y seguridad.

Para la industria, este acuerdo publicado ayer en el DOF implica “libre importación de medicamentos e insumos para la salud, cuando se encuentren registrados y se vendan libremente en su país de origen”, sean medicamentos genéricos o de especialidad farmacéutica, con sustancia activa o concentración en potencia.

O sea, se podrá importar el medicamento sin registro sanitario, aun cuando los precalificados OMS/OPS puedan ser proveedores que no están avalados por las propias organizaciones, razón por la cual esa calidad y seguridad serán responsabilidad del país que los importe y no de quien los exporta. ¿Será que lo habrán leído?

Hay muchos medicamentos OMS/OPS de China e India, que tienen warning letters de la FDA y de la agencia europea, por mencionar algunas, porque no cumplen con los estándares requeridos y, dada la situación que estamos viviendo, creo que la decisión, no consultada ni comunicada empeorará las cosas, pues por el lío con una clave, ¡pretenden desplazar a toda la industria!

Lo interesante es ver si la Cofepris, de Jorge Novelo, se hará responsable, porque en México no hay ni habrá responsables sanitarios de esos productos, como es el caso de la producción de Sudamérica y Asia.

Y si, la semana pasada, Alfonso Romo recibó un rotundo “no habrá inversión” de la industria farmacéutica, dada la política de prejuicio y obstrucción regulatoria, con este acuerdo ni la nacional o internacional podría comprometerse a surtir el mercado.

 DE FONDOS A FONDO

#PublicidadEncubierta… En España, Autocontrol, la agencia de autorregulación de la industria publicitaria, sacó una alerta amarilla a todos los influencers que difunden publicidad encubierta en las redes sociales con comentarios “generales”, pero que inducen a la utilización, compra, consumo o disposición de marcas específicas.

Fíjese que aun cuando no está en el radar de su homóloga en México, la Conar, que preside Mauricio Soriano Ariza, la realidad es que, en materia de autorregulación publicitaria, la publicidad a través de influencers permite saltarse toda clase de regulaciones y normas a las que se sujetan las marcas en los medios tradicionales, como la televisión, los medios impresos y la radio.

Por eso, en la Secretaría de Salud, que lleva Jorge Alcocer, y apoyados en un amplio sistema de comunicación digital como el que tiene la actual administración, se está evaluando el uso de la publicidad encubierta en la venta de productos chatarra y milagro, porque se estima que el 98% de los posts que son colocados en medios digitales (Instagram, Facebook, Google, etcétera) no están debidamente identificados con su propósito comercial. 

Imagine lo que haría la Condusef, de Óscar Rosado, si revisa la cantidad de promociones en el marketing digital via influencers, para la captura de clientes por las llamadas fintechs o, las mismas plataformas digitales de algunos intermediarios bancarios. Allí nadie tiene que cumplir con las leyendas de advertencia que impone el Banco de México o Hacienda.

Así, el llamado influencer marketing, que está destinado a lanzar productos, plataformas o negocios, tendrá marcaje hasta del SAT, de Raquel Buenrostro, porque forma parte del negocio de marketing digital a que hoy se dirigen 33 mil 500 millones de pesos, según el IAB México, que preside Federico Isuani desde el pasado diciembre.

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