5 habilidades que te harán un gran inversionista

A lo largo de la historia hemos conocido de grandes inversionistas, a través de libros, notas, videos y noticias. Al estudiar y seguir leyendo salen a resaltar una serie de factores que parecen tener cierta conexión y que son más que la suma de ciertas habilidades que se topan con una oportunidad.

En uno de los famosos discursos de Warren Buffett, menciona que ha tenido la suerte de haber nacido en una época donde sus habilidades numéricas son altamente recompensadas. Ya que si hubiera nacido en la época de las cavernas donde tendría que cazar enormes animales para alimentarse, no hubiera durado ni un solo día.

Hablando de grandes inversionistas de los mercadosm se detectan ciertas habilidades que si bien no son las únicasm parecen repetirse.

1. Tienen una estrategia: Desarrollan una estrategia de inversión tras realizar muchas pruebas, de mucho estudio, actividad que implica aprender de los errores propios y ajenos. Esta estrategia es desarrollada a través del uso de una metodología y de dedicarle mucho tiempo. Generalmente tiene un toque único, ya que si todos los inversionistas basaran sus decisiones en el mismo sistema, ésta dejaría de ser rentable. Una vez que llegan a desarrollar una estrategia de la cual están convencidos tienen la habilidad de mantenerse con ella aun en los tiempos de alta volatilidad.

2. Son obsesivos: Al igual de los atletas de alto rendimiento, sólo tienen en mente un objetivo y trabajan muy duro para alcanzarlo. No sólo se trata de trabajar duro sino de hacerlo bien partiendo de que tienen el material y las condiciones para hacerlo. Tiene un programa donde van midiendo cada resultado, ya que entienden que sólo midiendo es como se puede mejorar.

3. Conocen el juego: Entienden que en el terreno de las inversiones, sobre todo en mercados bursátiles, se trata de detectar un activo a un precio subvaluado y concentrar una parte importante del capital en busca de obtener una ganancia importante y por encima del promedio. Para ello entienden primero el concepto de riesgo. No se puede aspirar a grandes rendimientos sin tener una dosis importante de riesgo y/o volatilidad. Saben que no deben dejarse llevar por las noticias ni por sus emociones. Las mejores oportunidades vienen disfrazadas de grandes riesgos, pero es ahí donde un pensamiento crítico sustentando en conocimiento y análisis puede ser la diferencia.

4. Se ponen plazos: Si bien es cierto que el largo plazo es la suma de los cortos plazos, entienden que ser inversionista requiere de tiempo. Las grandes fortunas que permanecen en el tiempo planean una estrategia por bloques; hay inversiones para el corto plazo y otras para el largo. El inversionista promedio generalmente piensa en el flujo y retornos inmediatos y va cambiando de inversión y estrategia a cada paso; lo que hace que los rendimientos en el largo plazo no sean tan grandes en comparación con los que tuvieron una visión de largo plazo desde un inicio.

5. Usan su cabeza: Utilizan en la mayoría de los casos, o al menos lo intentan, tanto su hemisferio izquierdo como el derecho. Usan el izquierdo para los cálculos y la organización, pero también usan el derecho para desarrollar cierto sentido del humor, humildad y sentido común. Algunos de ellos son muy buenos oradores y escriben muy bien. Son habilidades que los ayuda a convertirse en líderes y a la postre estas habilidades repercuten en su capacidad de influenciar a otras personas.

*gl