Se complica el T-MEC

No bien regresó Jesús Seade de su gira por Washington y Ottawa, que usó la tarde del domingo y la mañana de hoy para tener reuniones individuales y plenarias con los miembros de la iniciativa privada, en la que les explicó cuáles eran los cambios propuestos al T-MEC y trabajar sobre ellos con una visión de unidad.

Además del trabajo que se realizó entre el negociador en jefe del gobierno mexicano y los representantes de todos los sectores de la iniciativa privada se refrendó el mensaje de unidad. La necesidad de ir todos como una sola voz, como un solo grupo, tal y como lo ha venido recomendando el Padre del Análisis Superior en los últimos días.

Tal y como se los ha advertido el autor de esta columna, se requiere reafirmar la unión entre los mexicanos, de la que, desgraciadamente, no están participando algunos miembros y simpatizantes de Morena, quienes, en corto, deben ser conminados por el Presidente a tener una mejor actitud.

Desde el punto de vista de las propuestas, también ya le había adelantado que Seade y su equipo ya rechazaron por lo menos tres peticiones que son notoriamente improcedentes.

Una de ellas es la pretensión del gobierno de Estados Unidos de mandar inspectores a México para comprobar que se está cumpliendo con la ley laboral y usarla como pretexto para sanciones de casi cualquier tipo.

La posición del empresariado mexicano es de total apoyo y solidaridad con las gestiones de Seade, a quien siguen viendo como un funcionario sólido, capaz y honesto. Consideran que las grillas que algunos le hacen van en contra del interés nacional.

PREGUNTA TEÓRICA

Ante el aumento de las tensiones dentro de la negociación para ratificar el T-MEC, sería necesario que en los altos niveles del gobierno se hicieran las siguientes preguntas: si no se firma el acuerdo, ¿cómo afectará el resto de la relación entre México y Estados Unidos? ¿Se mantendrá la cooperación o se romperá con la administración de Donald Trump? ¿Cuál es el plan B?

¿Cuánto puede aceptar el gobierno mexicano que se retrase la firma del acuerdo comercial? ¿Se usarán medidas de apremio? En caso de que sí, ¿cuáles?

Ojalá que estas preguntas sólo sean teóricas, pero más vale esperar lo mejor y prepararse para lo peor.

REMATE ADVERTIDO

Quién sabe quiénes le están haciendo creer a Zoé Robledo que será el delfín del Presidente de la República para encabezar el gobierno federal a partir de 2024, por lo que toma la dirección del IMSS como una suerte de entrenamiento social para lo que, en su imaginación, será su próxima candidatura.

Este hombre se desenvuelve como si fueran actos políticos y no decisiones ejecutivas las que toma. Sólo vea el lanzamiento de la oferta de contrataciones, por momentos parecería que está hablando de un acto generoso del gobierno, como si fueran becas. Se le olvida que el IMSS es un organismo tripartito, en el que participan trabajadores y patrones, por lo que convertirlo en una agencia de promoción del Presidente y en la base de lo que, cree, será la plataforma de lanzamiento de su candidatura, es un error muy grave.

Por si fuera poco, usó los medios del IMSS para promover el AMLOFest, lo que no fue muy bien visto, ya que es uno más de los que usan recursos públicos para actos de promoción política.

REMATE PRESUPUESTAL

Póngale atención a Luz Elena González Escobar, secretaria de Administración y Finanzas del Gobierno de la CDMX.

El paquete económico para el año próximo plantea ingresos por unos 239 mil millones de pesos, de los cuales casi 47% serán ingresos propios, 51% de transferencias federales y un endeudamiento del 1.7% del total para concentrarlo en programas de educación, movilidad, agua, medio ambiente, salud y seguridad.

Mientras que el gasto aumentará 2.1%, en rubros como educación podrían tener un incremento del 128%, salud, del siete por ciento.