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Debido al nearshoring y a la posibilidad de menores tasas de interés, este año las fibras industriales serán de las favoritas de los inversionistas en nuestro país.
“El entorno de menores tasas podría beneficiar al sector, pero ajeno a dicho contexto, la clave será materializar las sinergias del nearshoring a través de capacidad para atender la demanda de nuevos espacios nuevos o ampliaciones”, dijo Roberto Solano, analista de Monex.
“Hacia 2024 esperamos un año de consolidación y expansión estratégica. A nivel sectorial, el industrial mantendría el liderazgo con adquisiciones y desarrollos (además una eventual OPI de Fibra Next, y ofertas como la de FibraMTY), el sector comercial se vería favorecido por un resiliente consumo, mientras que el sector de oficinas confirma un camino hacia una mayor ocupación, aseveró.
Destacó que, por cuarto año consecutivo, el sector industrial es el favorito si se trata de invertir en Fibras, seguido del comercial.
“De mantenerse la inercia operativa del sector, podríamos decir que el 2024 sería un segundo año consecutivo con un atractivo escenario para las fibras, recordando que algunos sectores han logrado superar el histórico 2019”, apuntó Solano, en un análisis.
Este año el desempeño de los fideicomisos de inversión en bienes raíces estará relacionado con seis factores: Recortes en la tasa de interés por parte de Banxico; inflación a la baja, aspecto clave para las renovaciones del área rentable; el despliegue de recursos para adquisiciones y desarrollos; la consolidación estratégica y mayor captación de recursos vía deuda o capital; un significativo regreso a los espacios corporativos; y mejores dividendos.
Según datos de Monex, el norte del país ha presentado una mayor IED y cuenta con mayores anuncios de inversión, el Bajío mantiene un crecimiento sostenido y el Centro presenta un amplio potencial en logística; asimismo, los estados que presentan mayor potencial de inversiones relacionadas al nearshoring son: Sonora, CDMX/Edomex, Nuevo León, Baja California, Chihuahua y Querétaro.
Acotó que la relocalización de plantas implicaría un aumento entre 5 y 8 puntos (%) al crecimiento del PIB en los próximos tres años, pero medido por flujos comerciales, de manera optimista se espera que las exportaciones alcancen valores superiores al 50.0% del PIB.
Por otro lado, hacia 2024, se espera que la IED ascienda a entre 40 mil y 42 mil millones de dólares, generando un crecimiento entre 6.0%-10.0%. Para los próximos 3-5 años, el efecto del nearshoring considera inversiones estimadas entre 100 mil millones de pesos y 150 mil millones de pesos, aspecto que se podría traducir en flujos para algunos Estados.
El factor clave del nearshoring es la cercanía con Estados Unidos, lo que está permitiendo que empresas procedentes de China se instalen en nuestro territorio.
