Economía mexicana sufrirá ralentización en 2023

El banco de inversiones UBS prevé que la economía mexicana acabe sufriendo una ralentización económica en 2023, principalmente por la desaceleración que se anticipa en Estados Unidos. 
Economía -
La bandera de México en el Zócalo en un tono color rojo.
El banco de inversiones UBS prevé que la economía mexicana acabe sufriendo una ralentización económica en 2023, principalmente por la desaceleración que se anticipa en Estados Unidos. Foto: iStock

El banco de inversiones UBS prevé que la economía mexicana acabe sufriendo una ralentización económica en 2023, con un crecimiento de 0.5 por ciento, principalmente por la desaceleración que se anticipa en Estados Unidos. 

De cara al futuro, creemos que la próxima desaceleración de Estados Unidos será perjudicial para el vecino del sur. México es una economía muy abierta y sus exportaciones representan el 38% del PIB. Casi el 80% de las exportaciones mexicanas van a territorio estadunidense. Por ese motivo, a medida que la economía estadunidense pierda impulso, cabe esperar que México sufra la misma suerte”, señaló. 

Abundó que la subida de las tasas de interés ya está afectando a la actividad económica estadunidense, un ejemplo es la construcción de vivienda que ya muestra una tendencia descendente porque el incremento de las tasas hipotecarias las hace menos asequibles. Esa tendencia podría afectar a las remesas enviadas a México, puesto que muchas obras de construcción en Estados Unidos emplean a trabajadores de origen mexicano. 

Aunado a que la inflación superior al promedio y la desaceleración de las remesas podrían frenar el consumo de los hogares en México. 

Por el lado de las perspectivas de inflación, UBS señala que la inflación general de México puede haber tocado techo en septiembre. Ante ello, anticipan factores que apuntan a una moderación de la inflación, entre los que cabe destacar una relajación de las perturbaciones para la cadena de suministro, la acumulación de inventario entre los minoristas de bienes duraderos y una ralentización de la actividad económica mundial. 

Sobre el tipo de cambio, reconocieron que la estabilidad macroeconómica y el elevado diferencial de tasas de interés con Estados Unidos, han favorecido al peso mexicano. 

Por ello, la moneda seguirá comportándose bien, “pero prevemos una depreciación moderada porque la Reserva Federal aún no ha terminado de subir las tasas de interés y se están revisando a la baja las previsiones para el crecimiento mundial”, alertaron. 

UBS estima que la paridad será de 20.5 pesos por dólar para el primer trimestre de 2023 y que se eleve hasta 21.5 pesos por dólar al cierre del siguiente año.

Estabilidad es la prioridad 

La institución con sede en Suiza prevé que las autoridades seguirán dando prioridad a la estabilidad macroeconómica. 

Consideran que la gestión macroeconómica conservadora es una condición necesaria, pero no suficiente para el desarrollo económico, por ello recomiendan que el gobierno deberá fomentar la inversión privada de forma más enérgica y fortalecer los motores de crecimiento internos. 

Hasta que no lleguen los cambios, la incertidumbre por la política regulatoria mantendrá al margen a muchos inversores, lo que supone un lastre para el crecimiento económico estructural”, señaló.

Por: Lindsay H. Esquivel 

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