Las obras de infraestructura que heredará López Obrador

En materia de comunicaciones y transportes, la presente administración dejará una abultada agenda pendiente, entre las que destacan la continuidad de obras transexenales y diversos proyectos en materia de ferrocarriles, aeropuertos, puertos e incluso de carreteras.

Entre los proyectos transexenales destaca la continuidad de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, del que se espera que la presente administración dejará terminada la obra negra del Edificio Terminal, de la Torre de Control y dos pistas en condiciones operables; para que pueda entrar en operación en 2020.

De la misma forma, se heredará la conclusión del Tren Interurbano México-Toluca, que no se terminará en el presente sexenio y por lo que la reactivación, en una nueva era, de los trenes de pasajeros no se concretará, aunque de acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) antes de que termine 2018, el proyecto deberá quedar en fase de pruebas técnicas, para entrar en operación hacia mediados de 2019.

Otro de los pendientes, aunque bajo la responsabilidad del gobierno de la Ciudad de México, será la terminación y puesta en marcha de la terminal intermodal de Observatorio y el tren que desde esa base conducirá hasta el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México.

Pero, además, la SCT ha informado que proyectos como el Tren México–Querétaro y el Transpeninsular, no están cancelados sino en proceso de revisión y readecuación para dejarlos a los nuevos gobernantes en una cartera de propuestas,

Tales proyectos se encuentran en proceso de revisión para dejarlos como propuestas al próximo gobierno, además de otros que incluyen un ferrocarril del Nuevo Aeropuerto Internacional de México–Teotihuacán.

La idea en el caso del tren México–Querétaro es aprovechar vías existentes que están en desuso, por lo que la Agencia Reguladora del Servicio Ferroviario (ARSF) ha iniciado estudios prospectivos, además de los ya realizados por Instituto Mexicano del Transporte (IMT), en los que se analizará la viabilidad técnica, económica y jurídica para impulsar concesiones de transporte de pasajeros en esa vía.

El Transpeninsular es parte del proyecto de las vías del sureste, en donde se visualiza la posibilidad de ampliar la vía que hoy existe de Valladolid hasta Cancún, con un trazo sobre la actual autopista que conecta a Mérida con Cancún, aprovechando el derecho de vía para que sea un transporte de carga y pasajeros.