¿Qué países tienen el menor y mayor salario mínimo en el mundo?

El trabajo remunerado dentro de nuestro sistema económico contribuye a la formación de un bienestar material para los individuos. Es natural que nos preguntemos ¿cuánto dinero debo recibir por trabajar? o al ceder determinada cantidad de tiempo, ¿cuánto debo percibir? Las brechas salariales son muy variables entre países, pero en México y en general América Latina, tienen los índices de mayor desigualdad.

El mercado laboral es uno de los más diversificados, con cazadores de talento en todas las ciudades, regido por una competencia en la que los individuos más calificados obtienen el resultado de su inversión en la construcción de capacidades profesionales: idiomas, estudios universitarios, especializaciones, maestrías, cursos de programación, cursos de liderazgo, psicología, management; el profesional debe estar en constante actualización y con una buena experiencia para seguir siendo atractivo en el mercado laboral.

Pero ¿qué ocurre con los trabajadores que perciben el salario mínimo? ¿qué países pagan el mayor y menor salario? ¿cómo éste permite a una sociedad reducir el nivel de desigualdad entre sus habitantes? 

• Los países con el menor salario mínimo mensual son (cifras en dólares):

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo 2022 (International Labor Organization).

• Las economías que pagan por encima de los $100 dólares mensuales encontramos a:

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo 2022 (International Labor Organization).

• México se encuentra en el rango de las economías emergentes sobre los $200 dólares mensuales:

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo 2022 (International Labor Organization).

• Aquellas economías que pagan más de $500 dólares mensuales son:

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo 2022 (International Labor Organization).

• Los salarios mínimos más altos son:

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo 2022 (International Labor Organization).

¿Cómo una política de mejora de salarios puede reducir la desigualdad en economías emergentes como México, Argentina o Brasil?

Las brechas salariales son un indicador sobre la realidad de la justicia social de cada país. Los ingresos representan la capacidad de acceso al bienestar material y la expansión de una globalización justa. En los países donde se observa una mayor desigualdad, los salarios mínimos son los más bajos. Según la Organización Internacional del Trabajo, en las economías más desarrolladas, entre 60% y 80% de las percepciones de una empresa son utilizados para pagar los salarios de los empleados; esta proporción se reduce a un 30% y 60% en las economías emergentes.

Los países que han desarrollado políticas en el sentido de incrementar el salario mínimo y asegurar programas de subsidios a la población más vulnerable, redujeron considerablemente la desigualdad en sus sociedades. El caso de Brasil es un ejemplo único, cuando cerca de 30 millones de familias fueron beneficiadas por el programa insignia de Lula, Bolsa Familia, muy similar a las becas y apoyos del gobierno federal de México.

Los salarios mínimos de países como Brasil, China, Turquía, o Rusia han permitido reducir la desigualdad en todas estas economías. Sin embargo, la desigualdad es perene, sobre todo en el salario de mujeres contra el de hombres; se calcula que en todo el mundo, las mujeres reciben un 20% menos, aun cuando se dedican a actividades similares según la OIT.

Las diferencias de percepciones por el trabajo son notables, sobre todo cuando los países que no han desarrollo servicios especializados obtienen los salarios mínimos más bajos del mundo. Los estudios de la Organización Internacional del Trabajo muestran que mientras el porcentaje de ingreso directo del trabajo disminuye, existe un aumento en la desigualdad de ingresos totales. La herramienta que permite medir la desigualdad en los ingresos es el coeficiente de Gini: mientras este sea más próximo a 100 (en la siguiente tabla se cambiaron porcentajes por puntos) existe una desigualdad máxima y mientras este se acerque a 0 existe una menor desigualdad.

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Banco Mundial, Índice de Gini.

El Índice de Gini tiene una relevancia importante pues nos muestra que las economías avanzadas no están exentas de provocar más desigualdad, como es el caso de Estados Unidos cuyo porcentaje mantiene una tendencia inversa, es decir, año con año los estadunidenses viven en más desigualdad de ingresos. Generalmente, cuando ocurren disminuciones en los salarios son los que menos perciben, quienes son afectados por políticas de ahorro de alguna empresa.

Tener un trabajo no garantiza una vida digna: la calidad en el trabajo también es importante

La productividad también se ve mermada, sobre todo cuando una economía tiene brechas salariales abismales. De esta manera, los países donde los salarios disminuyeron en un periodo de tiempo mediano, disminuyeron significativamente su productividad y son, en términos generales, los países que más horas trabajan, tanto anual como semanalmente.

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: OCDE.

Aunque sea algo que pareciera no estar relacionado con la desigualdad, las horas dedicadas al trabajo forman parte de un derecho fundamental de las personas, tema sobre el que la Organización Mundial del Trabajo ha resaltado la necesidad de incluir “Garantías Universales sobre el Trabajo”, de suerte que esto permita a las personas determinar un límite de horas, acceder a la seguridad social y el derecho a la salud en el trabajo y un salario digno.

Gráfico: Dinero en imagen, Fuente: Organización Internacional del Trabajo.

Dentro de los países cuya población pasa más tiempo trabajando encontramos que en Yemen el 97% de los empleados pasan más de 49 horas a la semana en sus trabajos. En segundo lugar, Qatar, donde el 88% de la población económicamente activa vive en esta condición; seguido por Camboya y Bangladesh con un 56% y 50% respectivamente.

La desigualdad en las economías avanza y retrocede por diversas razones, algunas de ellas, en economías avanzadas, muestran que mientras existe una alta especialización de la mano de obra, la desigualdad tiende a elevarse; mientras que en economías emergentes, la acumulación espontánea de capitales, provoca desigualdad dentro de estos países.

Con información de la Organización Internacional del Trabajo, Banco Mundial, OCDE

Por: Sebastián Olivera 

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