CIUDAD DE MÉXICO.- En respuesta a las restricciones sobre las importaciones chinas de chips fabricados con componentes estadounidenses, los líderes de la industria Huawei y ZTE ratificarán una estrategia de dominio en la industria de semiconductores para el año 2025.
Las restricciones de la administración Trump impiden que Huawei produzca sus chips de diseño propio a través de fabricantes de última generación de Taiwán, desde donde obtiene la gran parte de su inventario de procesadores para servidores y smartphones.
“La nueva capacidad de China de diseñar chips de alto nivel, incluyendo los conjuntos Kirin y Ascend para servidores de Inteligencia Artificial, ha tomado a Washington por sorpresa”, planteó David P. Goldman, analista y editor en Asia Times, recientemente.
Luego del anuncio de las restricciones, los fabricantes de semiconductores estadounidenses, con el apoyo del Departamento de Defensa, indicaron a la administración Trump que un bloqueo a las compras de China de chips de Estados Unidos dañaría a la industria estadounidense, más que a China.
Ante esto, China, que cada cinco años lanza un plan de estímulo económico que tiene por objetivo impulsar la evolución tecnológica de la industria, ejercerá en su nuevo plan un presupuesto de 1.4 billones de dólares para fundamentar su liderazgo y enfrentar las restricciones de EE. UU.
Entre las iniciativas, destaca la contratación de miles de ingenieros de fabricación de chips de Taiwán para trabajar en el continente, pagando doble salario. Huawei está enfocada en ser autosuficiente a través del fortalecimiento del talento para acelerar el desarrollo y producción de semiconductores.